UNAM confirma que el conejo teporingo no ha desaparecido, pero su situación es crítica

UNAM confirma que el conejo teporingo no ha desaparecido, pero su situación es crítica

El bajo nivel de reproducción, la deforestación y la pérdida de su hábitat mantienen al borde de la extinción al teporingo mexicano.

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19/08/2025 22:08
Fuente: Prensa Libre 

La deforestación, la pérdida de su hábitat y su escasa capacidad reproductiva mantienen al teporingo mexicano (Romerolagus diazi) en la lista de especies en peligro de extinción desde hace cuatro décadas, según la Dirección General de Divulgación de la Ciencia de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Alejandra Alvarado Zink, investigadora de la UNAM, indicó que, pese a una publicación que se viralizó en los últimos días —en la que se afirma que el teporingo ya se extinguió en el Nevado de Toluca, Estado de México—, la especie continúa sin un horizonte claro de recuperación, pero no ha desaparecido.

Este conejo, endémico del Eje Neovolcánico, enfrenta un escenario adverso en las montañas donde habita, pues, según Alvarado, la tala inmoderada y el aprovechamiento de hongos y otros recursos han reducido drásticamente las áreas que necesita para sobrevivir.

Además, la construcción de carreteras que fragmentan los bosques ha dejado a la especie cada vez más aislada y vulnerable a la extinción.

Su biología juega en su contra

Alvarado añadió que la biología del teporingo juega en su contra, ya que, a diferencia de otros conejos que suelen tener camadas numerosas, este apenas logra uno o dos gazapos por temporada, lo que limita la recuperación de su población.

“En un entorno cada vez más transformado, la especie ha quedado expuesta al colapso”, advirtió Alvarado.

“No se puede conservar a una especie sin su medio ambiente y sin los animales con los que convive, porque entonces no tendría ni alimento ni depredadores. En otras palabras, proteger al teporingo pasa por proteger también el bosque de zacatón y los ecosistemas de altura que le dan sustento”, agregó Alvarado, especialista en mamíferos pequeños.

También advirtió que, si las presiones humanas no se detienen, el teporingo, también conocido como zacatuche, corre el riesgo de convertirse en un símbolo de pérdida irreparable para la biodiversidad mexicana.