Aurora FC volvió a rugir como en sus mejores tiempos. Uno de los equipos más históricos y laureados del fútbol guatemalteco volvió a levantar un título, esta vez en la Primera División, tras consagrarse campeón del torneo Clausura 2025 al derrotar a Mictlán en una emocionante final de vuelta disputada en Asunción Mita, Jutiapa.

El conjunto militar llegaba con ventaja tras haber ganado el partido de ida por 2-0 en el estadio Guillermo Slowing. Esa diferencia fue clave para manejar la presión en territorio ajeno, pero lo que hizo el equipo de aurinegro fue mucho más que defender un resultado: fue a imponer condiciones, a escribir historia y a confirmar que la grandeza no se pierde, aunque se juegue en otra categoría.

El estadio La Asunción estaba repleto. Mictlán confiaba en la remontada, empujado por su gente y con la ilusión de sumar otro título en casa. Pero Aurora silenció la fiesta muy temprano. Allan García, con un cabezazo seco y certero, marcó el primer gol del partido y amplió la ventaja global a 3-0. Fue un golpe de autoridad que marcó el rumbo de la final.

Y no pasó mucho tiempo tras el descanso cuando Aurora volvió a golpear. Ibargüen, tras un rebote del portero local, no perdonó y empujó el balón para el 0-2 en la vuelta y el 4-0 global. Era un mazazo para los Conejos, que veían cómo el título comenzaba a esfumarse frente a sus ojos.

Sin embargo, Mictlán no bajó los brazos. En un par de minutos eléctricos lograron igualar el partido 2-2, reanimando a su afición y poniendo algo de dramatismo al cierre. Pero ahí fue cuando apareció la figura de la noche: Liborio Sánchez, el portero mexicano de Aurora, que sacó manos milagrosas, voladas felinas y temple de campeón. Tapó absolutamente todo y se erigió como el héroe del título.

Aurora defendió con corazón, resistió el vendaval en los minutos finales y celebró con el pitazo final un nuevo capítulo dorado en su rica historia. No solo alzaron el trofeo de campeones del Clausura, también demostraron que el ADN ganador sigue intacto, aún en la Primera División.

Este título no solo devuelve la gloria a Aurora en el plano de ascenso, sino que también lo coloca a un solo partido de regresar a la Liga Mayor, la máxima categoría del fútbol nacional, donde tantos años fue protagonista. El sábado 31 de mayo enfrentarán a Sacachispas, en el partido por el ascenso directo. La finalísima.

Aurora FC suma ahora su primer título en esta nueva etapa, pero su mirada está fija en volver al lugar del que nunca debió salir. Con jugadores determinantes, una estructura sólida y una historia que pesa, el equipo militar apunta con firmeza al regreso al fútbol grande de Guatemala.

El ascenso está a un paso, pero el reto será durísimo. Sacachispas también sueña con la gloria, y el duelo promete ser de alto voltaje. Pero por ahora, en Aurora todo es celebración. Los militares ganaron la guerra táctica, la batalla física y el trofeo del honor.