La ley de Tránsito dice que es obligación ceder el paso a los vehículos de emergencia como ambulancias y autopatrullas de la Policía Nacional Civil (PNC) que circulen con sirena abierta, un tema complicado cuando automovilistas se rehusan a cumplirlo, al considerar que en algunas ocasiones no hay una urgencia y solo quieren evadir los atascos.

Cada segundo cuenta para salvar una vida, dicen los socorristas. Sin embargo, la capital, Mixco, Villa Nueva, Quetzaltenango y Escuintla, son algunas de las regiones con más tránsito, y por consiguiente más complicado para abrirse paso en las emergencias, dicen los cuerpos de socorro, no solo por los atascos, sino porque las ciudades carecen de una infraestructura vial amplia.

Los accidentes entre automóviles particulares y vehículos de emergencia por lo general ocurren en las intersecciones, debido a que no se respeta el paso de las ambulancias, afirman Bomberos Voluntarios.

Autoridades de la Policía Municipal de Tránsito (PMT) de la capital aseguran que el tema es complicado, pues han identificado una serie de inconvenientes que han hecho cambiar el pensamiento de los conductores, como vehículos particulares que circulan con sirenas y luces de emergencia, lo que califican de irresponsable.

Zona peligrosa

Los Bomberos Municipales refieren que una de las zonas con más reportes de colisiones entre vehículos particulares y de emergencia es la zona 1 capitalina, debido a la cantidad de intersecciones y porque no se respeta la luz del semáforo.

La PMT recalca que todas las ambulancias, incluidas las de los cuerpos de socorro, deben de estar registradas en el Departamento de Tránsito de la PNC, pues algunas no portan número de registro ni placa de circulación.