El viernes 27 de junio de 2025, un tribunal federal de San Antonio dictó sentencias de prisión de por vida a dos ciudadanos mexicanos por su participación en la muerte de 53 migrantes, quienes fallecieron sofocados dentro de un camión de carga encontrado en Texas, en junio de 2022.

El informe detalla que Felipe Orduña Torres, identificado como líder de la célula operativa en Estados Unidos, recibió dos cadenas perpetuas, además de una sentencia adicional de 20 años, que deberá cumplir de forma consecutiva.

La otra persona acusada del hecho, Armando González Ortega, su principal colaborador, fue sentenciado a 87 años y medio de prisión. Además, ambos imputados deberán pagar multas de 250,000 dólares cada uno.

La investigación reveló que las víctimas eran originarias de México, Guatemala, Honduras y El Salvador, y que habían sido trasladadas en condiciones insalubres, sin ventilación ni acceso a agua.

Las investigaciones demostraron que los migrantes golpearon y arañaron las paredes para intentar escapar o pedir auxilio. Agregan que 48 personas ya habían fallecido y otras cinco murieron poco después en hospitales.

Destacan que el extraditable guatemalteco Rigoberto Miranda Orozco tiene relación con este caso y enfrenta cargos. En este hecho la policía reportó que entre los fallecidos había 6 menores de edad y una mujer embarazada.