En el año 2022, la Fiscalía contra la Corrupción inició una investigación contra el Instituto de la Víctima, tras recibir una denuncia donde se señalaba de una supuesta contratación para el arrendamiento del edificio donde funciona las oficinas de la institución y donde se involucraba a su directora Alejandra Carrillo.

De acuerdo a lo señalado en aquel momento, la adjudicación podría haber sido irregular tras existir indicios de un negocio con el mismo, sin embargo, después de dos años, la actual fiscal a cargo recomendó desestimar la denuncia.

Según se indica, la fiscalía recibió un informe de la Contraloría General de Cuentas sobre este caso, en donde se señala que no hubo ningún hallazgo de acciones de corrupción, y al determinarse que en el contrato de arrendamiento del inmueble esta en orden, la fiscalía determina que no hay acto delictivo ni delito que perseguir.

Por tal razón se ha procedido a desestimar la denuncia y cerrar la carpeta ministerial.

Redacción: Sergio Osegueda