Lo que decimos importa: cómo el lenguaje moldea nuestra salud mental, según la psicología

Lo que decimos importa: cómo el lenguaje moldea nuestra salud mental, según la psicología

Las palabras tienen poder sobre la salud mental, advierten expertos, ya que pueden transformarse en realidades internas que afectan el bienestar emocional y físico.

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03/07/2025 10:55
Fuente: Prensa Libre 

La palabra tiene poder, y en la salud mental llega a influir. Psicólogos destacan que la forma de hablarle a otros o a sí mismo puede tener un alto impacto en la psique humana, lo que puede influir en la salud emocional y física de las personas, ya que las palabras moldean la mente y determinan cómo se actúa ante lo negativo.

Daniella Feterman, psicóloga holística, destaca que las palabras no solo comunican: también crean realidades internas que pueden regular las emociones y la personalidad.

“Lo que decimos y cómo lo decimos puede contenernos o abrumarnos, puede acercarnos o aislarnos, puede aliviar o lastimar”, afirma, por lo que considera necesario aprender a comunicarse tanto con los demás como consigo mismo.

La experta subraya que las palabras tienen un poder especial en las conversaciones internas, ya que son capaces de moldear los actos y esfuerzos. Explica que elegir conscientemente las palabras puede ser un acto de autocuidado y de empatía hacia los demás.

Se debe comprender que el lenguaje nace, en la mayoría de los casos, desde una perspectiva interna: un compendio de creencias, emociones, heridas y valores.

“Las palabras con las que hablamos del mundo y de nosotros mismos son como una ventana a nuestro mundo interno. A veces hablamos desde el miedo, otras desde el amor, la defensa o la necesidad de conexión. Por eso, prestar atención a cómo nos expresamos no es solo un acto de comunicación externa: también es un ejercicio de autoconocimiento”, indica Feterman.

Para la experta, es importante que las personas comprendan que la forma en que se comunican consigo mismas puede marcar la diferencia entre sostenerse o sabotearse.

“Tu diálogo interno es la voz que más escuchas en todo el día. Si es una voz que juzga, minimiza o presiona, probablemente te sientas agotado, confundido o desconectado. Pero si es una voz que contiene, comprende y valida, entonces se convierte en un recurso poderoso para regularte emocionalmente, tomar decisiones con mayor claridad y sentirte más en paz”, agregó.

Por su parte, Ximena Fuentes, psicóloga clínica y terapeuta de pareja, indica que la forma en que una persona se expresa influye directamente en su salud mental, tanto en sus emociones internas como en sus relaciones con los demás.

Fuentes detalla que dicha influencia se manifiesta en varios niveles: fisiológico, emocional, cognitivo y social.

El tono de voz también impacta la salud emocional

  • Un tono calmado y pausado contribuye a reducir la ansiedad y la tensión. Al emplear una voz serena, también se tranquiliza el sistema nervioso.
  • Un tono agresivo o elevado incrementa el estrés, propicia conflictos y activa el sistema de alerta, elevando los niveles de cortisol.
  • El diálogo interno también importa. El tono que se utiliza al hablar consigo mismo influye directamente en el estado anímico. Una voz interna crítica o severa puede reforzar pensamientos negativos.

El impacto del lenguaje en la salud mental

  • El lenguaje positivo y compasivo favorece la autoestima y la resiliencia. Expresiones como “Estoy aprendiendo” en lugar de “Soy un fracaso” generan una actitud más constructiva.
  • El uso de lenguaje negativo o absoluto, como “Nunca hago nada bien”, refuerza distorsiones cognitivas que afectan el bienestar emocional.
  • El lenguaje corporal complementa al verbal. Una expresión congruente —como la postura y el rostro— fortalece la conexión emocional y transmite autenticidad.

Apertura emocional y bienestar psicológico

  • Expresar sentimientos y vulnerabilidad ayuda a reducir la carga emocional y previene la acumulación de estrés o ansiedad.
  • Reprimir las emociones se asocia con síntomas de depresión, somatización y dificultades en las relaciones interpersonales.
  • La capacidad de verbalizar lo que se siente fortalece la autorregulación emocional y favorece una mejor salud mental.

Ximena Fuentes indica que el lenguaje tiene el poder de moldear el pensamiento y proteger la salud mental, ya que diversas teorías cognitivas sostienen que influye en la manera de pensar. Utilizar palabras para describir experiencias ayuda a procesarlas y comprenderlas.

“Expresarse en términos positivos o negativos no solo refleja el estado emocional, sino que también puede reforzarlo. Modificar el lenguaje es una vía para transformar la percepción de la realidad”, destacó.

Contar con una comunicación asertiva y empática fortalece los vínculos sociales, lo cual representa un factor protector clave para la salud mental. Por el contrario, la falta de habilidades comunicativas puede derivar en aislamiento, malentendidos o conflictos, aumentando el riesgo de padecer ansiedad o depresión.