Esta modalidad permite que personas naturales accedan a instrumentos financieros que antes eran utilizados principalmente por grandes instituciones o inversionistas mayoritarios.

En este esquema, el inversionista (denominado tenedor del bono) presta dinero al Estado. A cambio, recibe intereses cada seis meses, hasta la fecha de vencimiento del bono.

Según la Ley Orgánica del Presupuesto, Decreto 101-97, estos instrumentos financieros surgieron en su forma moderna a finales de los años 90 con el objetivo de cubrir el gasto público.

Pequeños inversionistas: Más de mil guatemaltecos apuestan por los bonos del Tesoro

De acuerdo con datos del Ministerio de Finanzas Públicas (Minfin), el rango de inversión entre los pequeños inversionistas oscila entre los Q5 mil y Q1 millón, siendo este último el límite establecido por el programa.

El monto promedio de inversión en este segmento se sitúa en Q290 mil, lo que evidencia un creciente interés por parte de la ciudadanía en diversificar sus ingresos mediante opciones respaldadas por el Estado.

Entre los pequeños inversionistas que manejan las cifras más elevadas, las inversiones se ubican entre los Q500 mil y Q1 millón, lo que los coloca en la parte alta del rango permitido por el programa de democratización.

Inversionistas mayoritarios: Con un promedio de inversión de Q100 millones

Por otro lado, los inversionistas mayoritarios, aquellos que participan en las licitaciones normales con Bonos AC (Bonos de Aceptación de Compra), sumaban 99 al 30 de abril del 2025.

Este grupo presenta un panorama distinto: el promedio de inversión entre ellos ronda los Q100 millones, aunque este dato está influenciado por la presencia de algunos inversionistas de gran volumen que elevan significativamente la media.

De hecho, los cuatro mayores inversionistas de este segmento tienen un promedio de inversión de Q5 mil 785 millones cada uno.

Tendencia: los pequeños inversionistas reinvierten

En cuanto al comportamiento de los pequeños inversionistas a lo largo del tiempo, el Minfin reporta que existe una clara tendencia a la reinversión, aunque los montos varían año con año, dependiendo de factores como la liquidez disponible y los rendimientos que ofrecen los bonos.

Esta constante reinversión sugiere un nivel de confianza sostenido en los Bonos del Tesoro como herramienta de ahorro e inversión.

Los datos al 13 de mayo del 2025 revelan que, solo en lo que va del año, 326 pequeños inversionistas han participado en la compra de Bonos del Tesoro, mientras que entre los mayoritarios se contabilizan 44 nuevos participantes.

¿Por qué invertir en Bonos del Tesoro de Guatemala?

Julio Marroquín, de la cartera de Finanzas, destaca que los bonos pueden adquirirse en cualquier momento del año, salvo cuando el Estado cierra la recepción de ofertas. Además, asegura que los inversionistas no pierden los intereses generados desde la fecha de licitación.

Por su parte, el viceministro de Finanzas, Walter Figueroa, resalta que estos bonos son considerados de “riesgo cero“, ya que están respaldados por el Estado, sin importar el gobierno de turno.

¿Cómo se calculan los intereses de los Bonos del Tesoro?

La fórmula estándar para calcular los intereses es la siguiente:

Valor Nominal × Tasa de Interés × Días Transcurridos ÷ 360

También se puede hacer el cálculo utilizando la herramienta digital de la Bolsa de Valores Nacional.

Ejemplos de intereses generados por invertir Q5 mil:

• A un año: Q150 en agosto y Q150 en febrero.

• A dos años: Q153.13 en cada semestre (cuatro pagos en total).

• A tres años: Q156.10 en cada semestre (seis pagos en total).

Los intereses de los Bonos del Tesoro se abonan de forma semestral, en los meses de agosto y febrero, y son depositados directamente en la cuenta bancaria registrada por el inversionista.

¿Cuál es la fecha límite para invertir en Bonos del Tesoro 2025?

Aunque la ley permite realizar colocaciones hasta el 31 de diciembre del 2025, en la práctica, el proceso suele concluir alrededor del 12 de diciembre, debido a la dinámica de la ejecución presupuestaria.

Este panorama refleja cómo los Bonos del Tesoro se han consolidado como una opción viable tanto para pequeños como grandes inversionistas, en un entorno económico donde la búsqueda de instrumentos financieros seguros sigue siendo prioridad para muchos guatemaltecos.