Los criterios ASG (Ambiente, social y gobernanza) o ESG por sus siglas en inglés, se refieren a los estándares utilizados para evaluar el impacto o adaptabilidad en dichos ejes temáticos que influyen en cómo cada compañía aporta en mejores prácticas sobre gestión de recursos naturales, cambio climático y relación con el planeta, además de derechos humanos, normas laborales, diversidad, igualdad; inclusión y relaciones con la sociedad. Por otro lado, se extiende en la estructura, gobierno interno, ética, anticorrupción, transparencia y toma de decisiones.

Es decir que los ASG son los lineamientos que permiten evaluar el rendimiento de las empresas en términos de contribución social, ambiental y de gobierno corporativo, mientras que la sostenibilidad es la capacidad de generar crecimiento económico y bienestar social presente sin comprometer los recursos naturales para las futuras generaciones.

Estos estándares internacionales han buscado generar un cambio e impacto positivo en las grandes empresas, en específico en cumplir con estos requerimientos acompañados de un plan estratégico de sostenibilidad que permita una proyección a largo plazo.

Además, existen calificadores de desempeño ASG que, a través de la información pública que revelan las empresas, son calificadas sobre su desempeño en los temas ambientales, sociales y de gobernanza, un ejemplo son las firmas S&P, Moody’s, Sustainalytics y Bloomberg.

Pese a que son una guía de acción, varias instituciones aplican según sus necesidades y requerimientos, este es el caso de Grupo Bancolombia que desarrolla un rating propio basado en la información pública que tienen sus clientes. Además, ha creado una visión única de la sostenibilidad, ya que, según ellos, “es la capacidad de hacer bien las cosas para alcanzar el bienestar de todos, equilibrando el crecimiento económico, el cuidado del medio ambiente y el progreso social”. Con ello, el Grupo ha construido un ecosistema financiero sólido, que impulsa la economía, el desarrollo de las comunidades y genera oportunidades para millones de clientes.

Localmente, Banco Agromercantil de Guatemala (Bam), ha trabajado en impulsar los negocios con propósito, enfocándose en tres pilares: el fortalecimiento del tejido productivo, la construcción de ciudades y comunidades sostenibles, y la inclusión financiera.

Además, entre las iniciativas destacadas resaltan la alianza con United Way Guatemala, con la cual, se fomenta el uso adecuado de los recursos naturales, especialmente en la primera infancia. En colaboración con FUNSEPA, se promueve la adopción digital en poblaciones vulnerables lo que ha permitido contribuir al cierre de la brecha digital. Adicionalmente, y según dio a conocer Bam, se han desarrollado productos financieros innovadores que impulsan el cuidado de los ecosistemas, tal como la “Cuenta del Mar” que fue diseñada para apoyar la preservación de los recursos marinos en Guatemala, todo esto adicional al respaldo en proyectos de construcción responsable y movilidad verde.

Todas estas iniciativas forman la misión regional del Grupo, que incluye diversos proyectos en El Salvador con Bancoagrícola, en Colombia Bancolombia y Banistmo en Panamá. Con ello, han buscado impactar de forma positiva en diferentes aspectos y sistemas económicos que ayuden a generar países más amigables con el ambiente y que puedan crecer en el tiempo.