El exceso de azúcares y grasas saturadas en la dieta infantil puede afectar negativamente la salud y el desarrollo de los niños, por lo que es esencial educar sobre elecciones alimenticias más saludables.

El consumo excesivo de azúcares y grasas saturadas puede ser perjudicial para los niños, ya que puede afectar su desarrollo físico y mental. Estas sustancias contribuyen al aumento de peso, problemas cardiovasculares y otros trastornos de salud, lo que resalta la importancia de educar sobre una alimentación balanceada desde temprana edad.

Con el regreso a clases 2025, surge un desafío importante en cuanto a la alimentación saludable de los estudiantes. Para abordar este tema, la Dirección de Atención y Asistencia al Consumidor, en colaboración con la Gremial de Lácteos y Productos Derivados, organizó una jornada enfocada en la nutrición y el consumo responsable.

El objetivo fue informar a padres, educadores y centros educativos sobre la importancia de elegir productos que apoyen el desarrollo saludable de los niños y adolescentes.

La jornada incluyó un taller sobre nutrición, en el cual se presentó un menú semanal para una lonchera escolar saludable, con el fin de orientar a los padres sobre las mejores opciones alimenticias para sus hijos.

Por Andrea Palacios