Pese a que los estatutos del Sindicato de Trabajadores de la Educación de Guatemala (STEG), señalan que cada dos años debe haber un cambio de directivos, Joviel Acevedo Ayala, ha logrado estar a la cabeza de dicha organización por más de 20 años y esta semana llevan a cabo una nueva protesta en contra del gobierno de Bernardo Arévalo, con un reducido grupo de maestros que acampan frente a Casa Presidencial.

Joviel se ha sentado con diferentes presidentes, quienes han entregado el mando, pero el dirigente sindical se mantiene a lo largo de los años, ¿Cómo lo ha conseguido? El profesor Otto Quintana, integrante del STEG de Retalhuleu, asegura que según dicho reglamento los dirigentes deben ser electos en asambleas generales, pero ese proceso no se ha hecho desde que Acevedo asumió el cargo de Secretario General.

“Él (Acevedo) lo que hace es que lleva a representantes de cada departamento, que son un grupo de afiliados como de 10 o 15 personas, y lo convierte en una asamblea nacional, levantan la mano y ratifican cada dos años su reelección. Así es como se ha mantenido. Él no convoca a elecciones”, declaró.

Quintana, quien es director de la Escuela Herlinda Calderón de Avelar, ubicada en Retalhuleu, señala que antes de la llegada del sindicalista, las votaciones eran democráticas, se hacían asambleas en los 22 departamentos y había un comité electoral en Guatemala, que contaba los votos.

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De acuerdo con el docente, anteriormente más de la mitad de los afiliados votaban para elegir a los directivos del sindicato y se presentaban las planillas de quienes participaban, pero ahora “todo está arreglado, todos van por la única planilla que es Acevedo”.

El entrevistado, dijo que otra de las razones por las que el dirigente lleva tanto tiempo al frente del STEG, es porque ninguno de los secretarios generales departamentales quieren asumir la responsabilidad, pero tampoco hay una convocatoria a elecciones libres y democráticas.

Al referirse al líder sindical dijo: “Antes era buen compañero, y buena gente. Después cambió y se volvió prepotente, déspota, abusivo, debe ser por el poder que ha conseguido, lo tuvo con los Gobiernos de Giammattei para atrás, ahora pocos lo están apoyando. Ahora le dicen el sindicato de Joviel, y no es de él, es de todos los afiliados”, manifestó.

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Por aparte, agregó que otro de los puntos que ha causado molestia en el magisterio es que al sindicalista y su círculo más cercano, no les gusta rendir cuentas, por eso es que no se hace el descuento de la cuota sindical, que según los estatutos es de 0.05 % del salario.

“Buscan cómo sobreviven por otros medios, no sé qué harán, pero cuota no reciben. Me imagino que tienen que gestionar fondos de alguna manera para sobrevivir”, reiteró.

SIN RESPUESTA DE JOVIEL

Se llamó a Joviel Acevedo para obtener su postura sobre las declaraciones de Quintana, pero al identificarnos como periodistas de La Hora, cortó la comunicación. Se intentó llamar después, pero ya no respondió.

CONCENTRACIÓN DE LIDERAZGOS

El analista político, Luis Mack, tiene dos hipótesis en relación con que los dirigentes se perpetúen en el tiempo en los cargos principales.

En su opinión, la sociedad guatemalteca tiene una “fascinación por los caudillos”, es decir, les gustan las personas con carácter fuerte, los dictadores.

La otra es que quienes están en esos puestos se mantienen por prebendas y una serie de transacciones clientelares, que establecen al ofrecer beneficios para sus seguidores.

“Si no me apoyas vas a estar mal, pero si me apoyas estarás bien. Se rodean de un grupo para asegurarse que sigan siendo reelegidos, ese círculo depende de esa transacción, de tener una recompensa y eso se replica en todos los eslabones del sindicato”, expresa.

De acuerdo con Mack, los allegados al sindicalista mantienen esa misma lógica clientelar y ya es una organización bien establecida. “Después de 20 años, Joviel Acevedo, debe manejar bien las estructuras de poder del sindicato”, dijo.

El especialista considera que el problema cuando los liderazgos tardan mucho tiempo, es que se desconectan de las necesidades reales de la población y en el caso del dirigente sindical, pudo ser bueno hace años, cuando empezó, pero ahora hay nuevas generaciones y necesidades que ya no toma en cuenta.

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“Como les ha funcionado tan bien, se sienten muy cómodos, pero ya no genera una lógica de conexión con la ciudadanía, simplemente hacen lo que siempre han hecho”, expresó.

Según Mack, es necesario que se conozcan nuevas propuestas, ya que esos “liderazgos caudillistas”, riñen contra la democracia sindical.

A criterio de Luis Linares, analista de la Asociación de Investigación de Estudios Sociales (ASIES), ninguna organización tiene límites para que sus dirigentes pasen tiempo al frente.

No obstante, coincide con Mack en que es necesario generar una efectiva democracia, la cual, en este caso, debe venir directamente desde los maestros, quienes son el sector sindical con mayor nivel de educación.

HAY QUE LIMPIAR EL NOMBRE DEL MAGISTERIO

“Paradójicamente, el magisterio nacional tuvo un papel virtuoso y una gran armonía con el papá del actual Presidente (Bernarndo Arévalo)y hoy él se encuentra con un sindicato manejado por una persona que lo que ha hecho es utilizar y manipular el sindicato para pactos con los gobiernos y que han guardado silencio ante los desmanes que se han producido y ante acciones de corrupción”, manifestó Linares.

Linares ejemplificó que los dirigentes actuales han sido cómplices de gobiernos anteriores, como el de Alejandro Giammattei, quien incluso les dejó encaminado el Pacto Colectivo de Trabajo y aceptó la confidencialidad del mismo.

“Por la necesidad política que han tenido del sindicato, le han dado todo lo que pide, eso lo ha empoderado”, reitera.

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El especialista se pronunció sobre el paro al que Joviel llamó esta semana, e indicó que es necesario que los maestros se protejan de ese tipo de expresiones y también ante la opinión pública, porque tienen un dirigente que no les hace ningún favor, más bien desprestigia al sector magisterial.

“Hay un manejo autoritario, una dictadura de Joviel y de su grupo. Es de esperar que desde la base sindical surjan esfuerzos y se logre la democratización a manera de recuperar el prestigio del gremio magisterial”, concluyó.

QUÉ DICEN LOS ESTATUTOS

En 2009 se hizo una reforma total a los estatutos del STEG. En el artículo 8 de dicho documento dice que todos los afiliados tienen voz y voto en las sesiones del Congreso Nacional, la Asamblea Seccional y la Subseccional a la que pertenecen, pero según Quintana, esto no se cumple a cabalidad.

El reglamento también detalla que los asociados pueden elegir y ser electos para cualquiera de los cargos del Comité Ejecutivo Nacional, el Consejo Nacional Subseccional, así como las comisiones que nombre el Congreso Nacional de Asambleas.

El artículo 22, que se refiere a las elecciones, señala que el Comité Ejecutivo Nacional, será electo por el Congreso Nacional. Las votaciones se realizarán con sesenta días de anticipación al vencimiento del periodo de los directivos que serán sustituidos y deben garantizarse que los sufragios sean secretos. Los dirigentes electos durarán en sus funciones por dos años.

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Sin embargo, no hay mayores detalles de cuántas planillas deben participar, con cuántos votos pueden ser elegidos, entre otros puntos que son elementales para una elección democrática.

Por otra parte, al referirse a la rendición de cuentas, los estatutos son claros al indicar que los afiliados tienen derecho de conocer el movimiento contable y financiero del sindicato.

Mientras que en el artículo 80, dice que se “aceptan aportaciones y donaciones por parte de personas o entidades identificadas con los bienes y objetivos del sindicato y que no afecten los intereses de la organización”.