La Policía Nacional Civil (PNC) informó que una adolescente de 15 años fue detenida el pasado sábado 10 de mayo en la colonia Santa María La Paz, en la zona 21 capitalina, luego de que se le señalara como presunta responsable del asesinato de tres hombres, todos miembros activos de la pandilla Barrio 18 de la clica «Solo Para Locos», a la que ella supuestamente también pertenece.

Según la PNC, el hecho ocurrió durante la madrugada, cuando vecinos alertaron sobre detonaciones de arma de fuego en el interior de un cuarto de alquiler.

Al llegar al lugar, agentes hallaron los cuerpos sin vida de tres hombres con impactos de bala; uno de ellos tenía las manos atadas.

En el lugar fue localizada una adolescente que, al notar la presencia policial, intentó ocultarse en otra habitación, por lo que una agente femenina, con autorización de un familiar, procedió a registrarla y le fue incautada una pistola Taurus con un cargador y tres cartuchos.

La menor fue puesta a disposición del Juzgado de Menores en Conflicto con la Ley Penal y la PNC indicó que se solicitará peritaje para determinar si el arma fue utilizada en el crimen.

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Tres mareros habrían sido ejecutados por una menor de 15 años de su misma clica de la pandilla del barrio 18

El reclutamiento y participación de adolescentes y mujeres dentro de las pandillas, inclusive para cometer actos cruelmente violentos como el sicariato pic.twitter.com/YL3PVnPO3o

— PNC de Guatemala (@PNCdeGuatemala) May 11, 2025

FALLECIDOS ERAN DE DISTINTOS LUGARES

Las autoridades indicaron que los tres fallecidos eran originarios de Jutiapa, de la colonia La Bethania y de El Salvador, y habían llegado al sector hacía apenas una semana.

Según la policía, estas personas ya habían sido perfilados por agentes de la comisaría 14 días atrás e investigaciones preliminares apuntan a que las víctimas esperaban instrucciones para perpetrar ataques en la zona 12 de Villa Nueva, siguiendo órdenes de su líder, Wilmer Rodríguez, alias “Pato”, quien se encuentra recluido en la cárcel de Fraijanes II.

Se presume que la adolescente, acompañada de otro individuo, fue enviada para ejecutar a sus propios compañeros de pandilla debido a disputas internas relacionadas con el control de extorsiones y distribución de droga. Los fallecidos tenían entre 21 y 23 años y no se compartieron sus nombres.