Rumania acusa a Kosovo de “faltar el respeto al deporte”

Rumania acusa a Kosovo de “faltar el respeto al deporte”

El partido entre Rumania y Kosovo fue interrumpido debido a que los jugadores de kosovares decidieron abandonar el terreno de juego en respuesta a los cánticos de “serbios, serbios” de algunos rumanos.

La Federación Rumana de Fútbol (FRF) emitió un comunicado en el que acusó al equipo nacional de Kosovo de “falta de respeto” y “desprecio al juego limpio” por los hechos ocurridos durante el partido disputado el pasado viernes en el Estadio Nacional de Bucarest, correspondiente a la Liga de Naciones de la UEFA. Además, la FRF rechazó como “infundadas” las acusaciones de comportamientos “racistas” que los representantes de Kosovo atribuyeron a los aficionados rumanos.

El partido, que hasta el minuto 90 permanecía empatado sin goles, fue interrumpido debido a que los jugadores de Kosovo decidieron abandonar el terreno de juego. Esta acción fue una respuesta a los cánticos de “serbios, serbios” por parte de algunos sectores de la afición rumana y a la exhibición de pancartas con el lema “Kosovo es Serbia”. Estos actos fueron interpretados por el equipo kosovar como comportamientos discriminatorios, considerando su contexto político: Kosovo se autoproclamó independiente de Serbia en 2008, una soberanía que Serbia aún no reconoce.

Rumania exige una pronta respuesta de la UEFA

En su comunicado, la FRF expresó “profunda decepción” por el comportamiento de la delegación kosovar y señaló que las acusaciones de racismo carecen de fundamento. La federación argumentó que los cánticos mencionados no tuvieron lugar durante el partido y recordó una decisión previa del Comité Disciplinario de la UEFA que concluyó que el lema “Kosovo es Serbia” no puede clasificarse como racista.

“Consideramos que las acciones de los jugadores de Kosovo fueron premeditadas”, añadió la FRF, refiriéndose a la retirada del equipo del campo en los últimos minutos del encuentro. Según la federación rumana, esta acción fue lamentable y contraria a los principios del juego limpio, especialmente porque el resultado no favorecía al conjunto kosovar.

El incidente adquiere una dimensión más compleja por el trasfondo político entre Kosovo y Serbia, así como por el liderazgo de Rumania en el grupo 2 de la liga C, con 12 puntos, tres más que Kosovo. En este contexto, la FRF destacó la importancia de mantener el enfoque en el aspecto deportivo, agradeciendo a los casi 50,000 aficionados presentes en el estadio por su “actitud civilizada”.

Por su parte, la federación rumana espera una resolución de la UEFA sobre el incidente, confiando en que esté alineada con los valores del deporte.