Un estudio reciente realizado por la Universidad del Valle ha revelado que camarones, pescado, cangrejos y otros animales de mar que se utilizan para consumo humano en Guatemala registran presencia de microplásticos en su organismo que finalmente son consumidos por los guatemaltecos.

Este estudio ya se ha realizado por otras organizaciones, según explica Izquierdo, la existencia de microplásticos en el ambiente ha hecho que ahora el humano consume lo que deshecha y que tiene como punto final el mar.

Entre los estudios realizados, se ha llegado a determinar que el ser humano está consumiendo cerca de 5 gramos de plástico semanales, lo que es equivalente a una tarjeta de crédito.

La campaña de concientización busca que las personas rechacen el plástico de un solo uso y busquen alternativas para realizar envases o conservar otros elementos.