El papa Francisco dejó de utilizar una máscara de oxígeno, anunció el Vaticano este 19 de marzo. Además, se indicó que las condiciones clínicas del pontífice, de 88 años, están “mejorando” tras más de un mes hospitalizado.

El jesuita argentino permanece ingresado en el hospital Gemelli de Roma desde el 14 de febrero, debido a una neumonía en ambos pulmones. No obstante, la Santa Sede informó sobre recientes progresos luego de un periodo crítico, marcado por crisis respiratorias que hicieron temer por su vida. El papa Francisco es propenso a las enfermedades respiratorias, pues en su juventud le extirparon parte de un pulmón.

Se confirma que las condiciones clínicas del Santo Padre están mejorando, escribió el Vaticano en un boletín médico, que ahora publica esporádicamente en lugar de a diario, dada su mejoría. La neumonía del papa no ha sido eliminada, pero está bajo control, según la oficina de prensa del Vaticano.

Hasta esta semana, el papa había llevado una máscara de oxígeno, pero el martes el Vaticano informó que logró prescindir de ella por primera vez. Durante el día utiliza una cánula nasal para recibir oxígeno a alto flujo, cuya administración los médicos están reduciendo, sentenció el Vaticano.

Proceso para su recuperación

Según dicha prensa, se ha suspendido la ventilación mecánica no invasiva y también se ha reducido la necesidad de oxigenoterapia de alto flujo. A partir de esto, se aseguró que ha habido progresos en la fisioterapia motora y respiratoria del papa.

Tras la serie de crisis respiratorias, la respiración del pontífice mejoró en la última semana, y el Vaticano declaró el lunes que estaba pasando breves momentos sin aporte de oxígeno.

El delicado estado de salud del papa suscitó dudas sobre quién podría dirigir el programa de actos religiosos previos a la Pascua, el período más sagrado del calendario cristiano. El Vaticano declaró el miércoles que aún no se ha tomado ninguna decisión definitiva.

A pesar de su reciente mejoría, la Santa Sede aún no ha comunicado cuándo podría salir del hospital. El fin de semana informó que el jesuita sigue necesitando recibir terapias en el centro asistencial.