El equipo de Canal Antigua logró dar un recorrido por la zona afectada en Santa María de Jesús, a consecuencia del enjambre de sismo que inició desde el pasado 08 de julio y varios de sus vecinos dieron sus testimonios.

Esto es Santa María de Jesús, en Sacatepéquez, una de las comunidades más afectadas por los fuertes sismos registrados desde el pasado 8 de septiembre…

El acceso principal al municipio está completamente bloqueado. Los derrumbes provocaron el colapso de la carretera, y ni vehículos livianos ni pesados pueden ingresar. Personal del Cuerpo de Ingenieros trabaja en la remoción de escombros y árboles que cayeron sobre la vía.

Luego de un trayecto de casi dos horas caminando, el equipo de Canal Antigua finalmente logró adentrarse a lo más profundo de Santa María de Jesús; su gente.

Una de las vecinas de la localidad relató los momentos de pánico que vivieron durante el segundo sismo y que dejó serios daños dentro de su vivienda, a tal punto que ahora no pueden habitarla, ya que un sismo igual de fuerte podría provocar un derrumbe de esta y otras viviendas.

Otro vecino del lugar expresó su preocupación por la situación que enfrentan. Dijo que se sienten completamente aislados del mundo exterior: no hay señal telefónica ni acceso a internet, están sin energía eléctrica y comienzan a escasear los alimentos para las familias que permanecen en la zona afectada.

Al seguirnos adentrando aún más en Santa María de Jesús, localizamos el trágico derrumbe del templo El Calvario, el cual colapso totalmente, luego del segundo sismo…

Estas familias ahora acampan a las afueras de sus viviendas, sin posibilidad de luz o señal telefónica y con temor que ya sea un sismo o una fuerte lluvia pueda provocar el colapso total de lo que aún queda de sus viviendas.

Algunas personas han optado por resguardarse en salones comunales y espacios públicos, ante el temor de nuevos sismos que continúan registrándose en la zona.

Otras han sido trasladadas a un albergue provisional en Antigua Guatemala, luego de perder la posibilidad de permanecer en sus viviendas.

El presidente Bernardo Arévalo visitó la comunidad el 9 de julio y aseguró que se están haciendo todos los esfuerzos necesarios.

Sin embargo, los vecinos afirman que lo único que desean es poder comunicarse con sus familias y recuperar la tranquilidad de dormir bajo sus propios techos.

Por Bryan Choy