Carlos González, vocalista principal del Grupo Fugitivo, es el único sobreviviente de la masacre que costó la vida a cuatro de sus compañeros y al representante de la agrupación en Reynosa, Tamaulipas, México, el pasado fin de semana, tras haber sido contratados para un evento privado.

Mientras los nombres de Francisco Xavier Vázquez Osorio, Víctor Manuel Garza Cervantes, José Francisco Morales Martínez, Nemesio Antonio Durán Rodríguez y Livan Edyberto Solís de la Rosa (representante de la banda) figuraban en las publicaciones por su desaparición, la identidad de Carlos González no se incluía en los reportes, debido a que sobrevivió a la matanza.

Según reportes oficiales, Carlos González se salvó de la agresión porque el 25 de mayo tuvo un retraso y no logró viajar con sus compañeros en la camioneta que habitualmente utilizaba. Luego intentó incorporarse al grupo, pero en la dirección a la que habían sido citados solo encontró un terreno baldío.

Familiares de las víctimas contaron a medios locales que Carlos González tenía previsto presentarse junto con sus compañeros en un evento privado en la colonia Riberas de Rancho Grande, al oriente de Reynosa. Sin embargo, ese día se retrasó y no alcanzó a salir con ellos en el mismo vehículo rumbo al evento. Un video en Facebook confirma que Carlos sí estaba con ellos antes de la última presentación. Cuando finalmente llegó al punto de encuentro, el lugar estaba vacío.

El sobreviviente, ante la falta de información, regresó a su domicilio sin saber que sus compañeros habían partido rumbo a lo que sería su último evento.

El lunes por la tarde, la Comisión Estatal de Búsqueda emitió fichas para cinco personas: los cuatro músicos y su representante legal.

Desde la desaparición y posterior localización sin vida de sus compañeros, Carlos González no ha hecho declaraciones públicas ni ha publicado en sus redes sociales ni ha aparecido en entrevistas o actos conmemorativos.

De acuerdo con la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas, las cinco víctimas se trasladaban a bordo de una camioneta negra cuando fueron privadas de su libertad cerca de las 22.00 horas. El vehículo fue localizado el martes 27 de mayo en la colonia La Cañada, pero sin los distintivos del grupo.

Gracias al análisis de cámaras de videovigilancia y rastreo telefónico, las autoridades locales llegaron el miércoles pasado a un predio de la colonia Aquiles Serdán, donde localizaron cinco cuerpos, cerca del ejido Los Longoria, en los márgenes del río Bravo.

Las primeras investigaciones apuntan a que las víctimas fueron asesinadas y posteriormente sus victimarios intentaron carbonizarlas.

La Fiscalía señala como responsables a miembros de la célula criminal “Los Metros”, perteneciente al Cartel del Golfo, con base de operaciones en Reynosa.