El presidente Bernardo Arévalo reaccionó a los resultados de la última encuesta de CID Gallup, que refleja una disminución en la percepción ciudadana sobre su desempeño. Aunque intentó restarle importancia, afirmando que el Ejecutivo cuenta con “sus propios métodos” para medir la aceptación, terminó reconociendo que la evaluación de su gestión es baja.

Según CID Gallup, Arévalo cuenta con un 39% de aprobación, ubicándose en la novena posición dentro del ranking de popularidad de 11 mandatarios latinoamericanos. Esto representa una caída significativa respecto a enero de 2024, cuando la misma consultora lo posicionaba con un 78% de aprobación.

La encuesta, realizada en enero de 2025 con una muestra de 1,200 ciudadanos, evidencia una tendencia a la baja en la percepción de su administración. De acuerdo con el informe, el presidente guatemalteco solo supera en evaluación a los mandatarios de Bolivia y Argentina, mientras que los gobernantes de El Salvador, Costa Rica, República Dominicana y Panamá lideran el ranking de aceptación.

Desde que asumió la presidencia, la imagen de Arévalo ha variado según las mediciones. En septiembre de 2023, un mes después de ganar las elecciones, contaba con una aprobación del 64%, lo que lo ubicaba como la quinta figura pública con mejor opinión en la región. Para enero de 2024, su aprobación alcanzó un 78%, pero en abril del mismo año cayó al 54%.

La disminución en la percepción positiva de su gobierno se da en un contexto de crisis en infraestructura, como el colapso de la autopista Palín-Escuintla, así como la falta de avances en su intento por remover a la fiscal general, Consuelo Porras.

CID Gallup sostiene que su encuesta tiene un 95% de nivel de confianza, y su metodología se basa en entrevistas directas sobre la percepción ciudadana respecto al desempeño presidencial.

Por Andrea Palacios