Con la llegada del fin de año, se viven las tradiciones de la época, en especial, las culinarias ya que son la excusa perfecta para reunir a familia y amigos al rededor de la mesa, dónde se comparte y se recuerda a los seres queridos que ya no están presentes.

Este año, Intecap abordó la preparación del fiambre de forma diferente que en años anteriores, ya que incorporó la participación de los estudiantes de las carreras de gastronomía y los alumnos de los cursos de embutidos que, juntos, hicieron posible el tradicional platillo de una forma única.

Desde sus inicios, cada año los profesores han inculcado en los grupos y carreras la elaboración del Fiambre blanco y colorado en las clases de cocina justo para esta época, sin embargo, este 2024 se unió el Centro de Capacitación de Tecnología de la Carne CETEC con la elaboración de los embutidos utilizados para darle color y ese toque especial que demostró gran habilidad gastronómica.

Para Óscar Chinchilla, Gerente de Intecap, «es fundamental que sigamos preservando la tradición del fiambre, no solo como un platillo representativo, sino como un símbolo de nuestra identidad cultural. Con su mezcla de ingredientes y sabores, cuenta la historia de Guatemala y honra nuestra diversidad».

Y es que en cada uno de los centros en dónde se imparten las clases de cocina, se ha resaltado los valores que caracterizan a Intecap, además de limpieza, orden, calidad y tradición para capacitar a los guatemaltecos.

En esta ocasión, dieron a conocer la incansable labor realizada en el Centro de Capacitación en Turismo que se encuentra en la Calle Doroteo Guamuch Flores, que cuenta con instalaciones modernas y aulas prácticas, en dónde, afirma, el objetivo principal es desarrollar y proporcionar las habilidades y conocimientos necesarios para destacarse en la industria. Por su lado, el CETEC ha sido un referente de calidad cárnica debido a la capacitación y oferta educativa vigente, con profesores enfocados en el sector apoyados pt las tendencias y nuevas tecnologías.

El Fiambre fue declarado Patrimonio Cultural Intangible de la Nación en Guatemala el 13 de octubre de 2019 a través del Acuerdo Ministerial 880-2019 y fue emitido por el Ministerio de Cultura y Deportes. Aunque cada persona cocina su receta familiar, se dice que se emplean más de 60 ingredientes que incluyen carnes frías, vinagres, especias, vegetales, lácteos y encurtidos. Es costumbre para las familias guatemaltecas realizarlo y consumirlo cada 1 de noviembre.