La Hora ha dado constante seguimiento al caso del Juez Miguel Ángel Gálvez y lo ha hecho dando a conocer los hechos relacionados con el espurio caso montado en su contra. No decimos que es espurio porque Gálvez nos caiga bien, sino simple y sencillamente porque los hechos lo confirman, tal y como lo expresamos en el editorial del sábado. Alrededor del caso se mueven intensamente las redes sociales y ya sabemos que los amigos del sistema detestan a Gálvez y despotrican contra él, razón por la cual, cuando se dio la noticia de su intempestiva salida del país, lo que hicimos fue llamarlo para confirmar o desmentir lo que era ya viral.

La respuesta categórica del Juez Gálvez a la consulta de La Hora sobre su salida del país fue decir que él está de vacaciones pero sin salir de Guatemala. Y así dimos la noticia nosotros, cumpliendo con nuestra norma de recurrir a la fuente directa para no terminar cayendo en el juego de los netcenteros o usuarios irresponsables que usan las redes sociales para mentir, para insultar y desinformar a la población.

Más tarde se supo de la reunión de jueces en Costa Rica y su análisis del Caso Gálvez, trascendiendo que en esa reunión estaba el juez guatemalteco. Volvimos a llamarlo para, nuevamente, corroborar las informaciones antes de publicar lo que aún eran rumores y Gálvez reconoció que estaba en el hermano país, que pronto volvería a Guatemala. Le preguntamos entonces si su salida fue cuando dijo Migración o después de que él la negó rotundamente y dijo que él no estaba para andar dando conferencias de prensa a cada rato.

Entonces, no hay otra conclusión de que en la primera llamada que hizo La Hora, para ver si era cierta o no la información de las autoridades migratorias, el juzgador nos mintió. Entendemos que él se encuentra sometido a inmensas presiones por el acoso de que es objeto y hasta afirmamos que si vuelve al país lo van a despedazar por su trayectoria como Juez probo, pero la respuesta que dio a nuestro periodista fue una rotunda e injustificada mentira.

Las redes sociales tienen muchas ventajas, pero se carece de la necesaria veracidad y muchos usuarios publican falsedades sin ninguna consecuencia. Ello obliga a la prensa a esmerarse en la confirmación de las noticias y recurrir a la fuente para darla de manera veraz. La credibilidad es lo que hace importante el papel de la prensa en esta era y, por ello, cuando una fuente miente hace daño a esa credibilidad.