El jefe de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), Rafael Curruchiche, se refirió este jueves 5 de diciembre acerca del operativo que está en desarrollo en las oficinas de una firma de auditores en la zona 15 capitalina, la cual es propiedad de los hermanos del jefe de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), Marco Livio Díaz.

Aunque no profundizó en el caso por estar todavía llevándose a cabo el allanamiento en el inmueble, el fiscal confirmó que es una investigación distinta a la denominada B410, relacionada con temas de posible defraudación tributaria.

Según indicó, la investigación que vincula a esta firma de auditoría se inició hace cuatro meses derivado de que se tuvo conocimiento de que a través de esta oficina varias empresas habían sido referidas para solventar la situación de investigación que tenía la SAT con respecto a las mismas.

“Se informó que a través de una firma de auditores muchas empresas habían sido referidas en la SAT para que, a través de la misma, les solventaran su situación ya que estaban siendo parte de investigación en la superintendencia. Quiero aclararle al pueblo de Guatemala que la investigación del caso B410, que tiene a su cargo la Fiscalía de Delitos Económicas, no tiene nada que ver con esta investigación”, expuso.

Curruchiche enfatizó que esta pesquisa no tiene relación con el caso B410 y que son totalmente distintas, por lo que señaló que le sorprenden las declaraciones de Díaz donde aseguró que se tenía algún vínculo del caso contra la firma auditores con el expediente de posible defraudación.

Según sus palabras, el superintendente no está siendo investigado en el marco de este caso y tampoco hay orden de captura emitida en su contra. En ese sentido, manifestó que es la firma de auditores la que está siendo objeto de averiguaciones.

El fiscal indicó que el operativo sigue en desarrollo y será tras concluir el mismo que se dará a los resultados.