¿Por qué la industria de reciclaje en Guatemala depende toda una cadena? Se han detectado dos modalidades de operar

¿Por qué la industria de reciclaje en Guatemala depende toda una cadena? Se han detectado dos modalidades de operar

La actividad de reciclaje en Guatemala puede considerarse incipiente, ya que solo el 4% de los desechos sólidos se reciclan o se vuelven abono en forma directa, mientas que dentro del 42% que se recolecta por diferentes servicios, también se extrae material de reciclaje.
22/02/2025 00:10
Fuente: Prensa Libre 

En la actividad de reciclaje se reflejan dos modalidades o características, una que es el posindustrial y que se lleva a cabo de manera más formal donde industrias y comercios trasladan su material por medio de recicladores a otras industrias que lo usan para transformarlo en bienes o material para otros usos.

Mientras, que también está el posconsumo, que desechan hogares, negocios u otro tipo de residuos comunes de industrias, y donde se dificulta la trazabilidad de la cadena de reciclaje con todos sus participantes.

Del total de residuos y desechos sólidos comunes en Guatemala alrededor del 56% son materiales orgánicos, mientras que el restante 44% está compuesto por 14% de desechos sanitarios; 13%, plástico; 6%, papel y cartón; 3%, vidrio; 2% por residuos peligrosos o especiales; 2%, metal y 4% por varios materiales, según datos del Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (Marn) de los años 2021 y 2022.

Sin embargo, solo el 4% del total de residuos y desechos sólidos se reciclan o se vuelven abono, según información derivada del Censo de Población del 2018 al referirse a las formas de eliminación de los residuos.

Otros números, que según expertos reflejan alarma, son que el 43% de los desechos de los hogares se queman, el 4% se entierran, un 3% se tiran en cualquier lugar, y 1% se tiran en ríos, quebradas o al mar.

Mientras que otro 42% se recolecta ya sea por las municipalidades o servicios formales o informales de extracción. Dentro de esta cifra, también sale material que es reciclado al cual se le denomina reciclaje posconsumo.

Conocedores del sector refieren que alrededor del 50% de lo recolectado es material orgánico no aprovechable para el reciclaje, mientras que es del restante 50% de donde salen ciertos materiales para reciclaje.

La industria del reciclaje

Consultado al respecto de la industria del reciclaje en el país, Raúl Bouscayrol, el presidente de la Cámara de Industria de Guatemala (CIG) refirió que en dicha organización identificaron alrededor de 20 empresas formalmente registradas que operan en el sector de reciclaje, las cuales abarcan materiales como plásticos, vidrio, metales ferrosos, y otros.

Refirió que “el sector del reciclaje ha experimentado un crecimiento sostenido tanto en su dimensión formal como informal”, pero que a nivel nacional, la gestión de residuos sigue siendo limitada con que un bajo porcentaje de eliminación y tratamiento adecuado.

El directivo explica que en la actualidad solo alrededor del 6% de los residuos se reciclan de manera eficiente en el país, pero que en el ámbito empresarial, este porcentaje es significativamente mayor, derivado de las actividades de reciclaje y la gestión responsable de desechos.

“En CIG, contamos con múltiples sectores que han realizado inversiones significativas en esta área, especialmente en el reciclaje de plásticos PET. Empresas dedicadas al acopio de papel, cartón, PET, chatarra ferrosa y no ferrosa, vidrio, plásticos y baterías han desarrollado estructuras bien establecidas para garantizar una disposición adecuada de estos materiales, con precios de mercado claramente definidos”, expresó sin mencionar cantidades.

El presidente de la CIG explicó que paralelamente, la economía informal juega un papel importante en el reciclaje, especialmente en los sitios de disposición final, donde los desechos son ampliamente clasificados y posteriormente incorporados al sector privado para su aprovechamiento.

El directivo industrial dijo, que no se dispone de datos sobre el crecimiento en términos monetarios de la actividad del reciclaje, y en a la expansión del sector de reciclaje en los últimos años, esta ha sido mínima, con un incremento del 2%.

“Esto se debe a la infraestructura limitada y a la falta de sistemas eficientes para la recolección y el reciclaje de residuos en Guatemala, lo que restringe el aprovechamiento pleno de su capacidad de reciclaje”, añadió a comentar que según el Censo de Población del 2018, solo el 42% de los hogares en el país cuenta con acceso al servicio de recolección de basura, lo que refleja que una parte considerable de los desechos no recibe un manejo adecuado.

En la última década, el interés del sector privado por el reciclaje y la gestión de desechos en Guatemala ha crecido considerablemente, con aumento en las inversiones para la recolección y procesamiento de diversos materiales reciclables, así como en la implementación de tecnologías para mejorar la eficiencia de los procesos, añadió.

Al referirse a sectores, mencionó que el de plásticos es el que más ha avanzado en su cadena de reciclaje a nivel nacional.

Según datos citados por Agexport, el sector de reciclaje representa alrededor de 26 mil empleos directos e indirectos.

Sector de plástico

Solo del vertedero de la zona 3 capitalina se recopilan unas de 400 toneladas de plástico por día, mientras que al sur de la capital y área metropolitana se obtienen en especial materiales de desecho que generan las maquilas, empaques de electrodomésticos y otras industrias, y que representaban en ese entonces unas 300 toneladas diarias, además de otros volúmenes menores que salen de otras áreas del país, según datos del año 2019 de la denominada Asociación de Plastiqueros y Recicladores de Guatemala (Asopregua).

Dicha entidad estimaba en ese entonces que la producción de productos reciclados al año llegaba a Q1 mil 848 millones, como bolsas para basura, tubería de poliducto, guacales y baños de todos tamaños, algunos juguetes, pelotas inflables, alcancías, además de la llamada madera plástica, para hacer muebles, escritorios, cercas y blocks.

En tanto la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport) indicó que en el año 2024 las exportaciones del sector de plásticos llegaron a US$547 millones, que incluye transformación de plásticos. Agrega que el sector nacional de plásticos es dominado por el apoyo de tres instituciones como la Asociación y Comisión Guatemalteca de Plásticos, Comisión de plásticos de Agexport, y la Gremial de Plásticos de la CIG.

En el 2024, empresas de la comisión destinaron una inversión significativa en iniciativas sostenibles, con las cuales se priorizó la recuperación de plásticos y su transformación en resinas recicladas, garantizando un ciclo de vida extendido para los materiales. Además, se integró tecnología avanzada para convertir botellas de plásticas recicladas en resinas reciclables que pueden ser utilizadas para fabricación de nuevos empaques y envases, ampliando las posibilidades de reutilización responsable en sectores clave, añadió Agexport.

Respecto a otros materiales, durante el 2024, Guatemala logró exportar productos de acero y aluminio por un valor total de US$21.3 millones, y los principales productos incluyen desperdicios y desechos de aluminio y sus manufacturas por US$9.9 millones, citó el Ministerio de Economía a mediados de febrero al responder sobre el tema de aranceles anunciados por Estados Unidos.

Vidrio

Grupo Vical indicó que Centroamérica alcanzó un nuevo récord histórico en el 2024 en reciclaje de vidrio con un total de 129 mil 950 toneladas métricas. De esta cifra, 55 mil 847 toneladas métricas fueron recicladas en Guatemala, con lo cual mantiene su posición como el país que más aporta al total del vidrio recuperado en la región con el 43%.

“Este logro es el resultado de la colaboración y el compromiso de la industria del vidrio, recolectores, centros de acopio y comunidad”, refirió la compañía.

El reciclaje de vidrio es un proceso extraordinariamente eficiente, ya que permite aprovechar la totalidad del material recuperado e incorporarlo hasta un 100% a la fórmula de vidrio nuevo. Esto le permite a la industria del vidrio un verdadero reciclaje de botella a botella y de manera infinita

Ese vidrio posconsumo, recuperado como pedacería de vidrio y conocido como cullet, proviene de vertederos en el país, recolectores y centros de acopio, hoteles, restaurantes, condominios, además del vidrio de embotelladoras, que realizan su propio acopio. El vidrio recolectado se recibe en las plantas del Grupo VICAL tanto en Costa Rica como en Guatemala en donde mediante un proceso de fundición simple se convierten en nuevas botellas de vidrio.

En el posconsumo

En el reciclaje derivado del posconsumo, las líneas de trazabilidad de los materiales son más difusas o difíciles de detectar porque es donde más se opera en el ámbito informal, según comentan fuentes de varios sectores.

Lo desechos son llevados por los recolectores por medio de transporte hacia los verteros. En los camiones se clasifica una parte y el personal de cada unidad lo vende a recicladores que están ubicados en las cercanías de los vertederos. Mientras que otra parte de los residuos entra a ese recinto y es clasificado por los recolectores de base, a quienes se les conoce comúnmente como guajeros para quienes esa labor se ha vuelto el ingreso para su sustento familiar y trabajan de manera informal ya que no son contratados ni por los verteros no por las recicladoras.

Otro problema según fuentes consultadas es que muchos negocios recicladores trabajan en la informalidad, incluso por eso es difícil contar con estadísticas del sector, y que es conforme va subiendo la cadena de reciclaje que se van formalizando ya que las empresas grandes compradoras piden los documentos de soporte.

Los recolectores, actores en la cadena de reciclaje

Consultado Miguel Carrera, presidente de la Gremial de Recolectores de Desechos Sólidos de Guatemala (Greredesolgua), estima que de lo reciclable alrededor del 60% es clasificado los trabajadores de cada camión quienes lo venden a los recicladores cercanos a los vertederos, y el pago se convierte en para de los ingresos de dichos trabajadores. Explica que a sus trabajadores les paga el salario mínimo más todas las prestaciones, y el dinero de la venta de lo reciclable no es trasladado al transportista, sino que se lo dividen entre los recolectores de cada camión como un ingreso extra.

El pago por esos residuos a cada camión llega a representar unos Q500 diarios.

Carrera explica que clasificar los residuos no es una labor nueva porque se hace desde que él empezó a trabajar en el sector hace más de 40 años.

Además, menciona que los negocios recicladores que compran en cercanías a los vertederos deben ser formales, porque sus compradores les piden la papelería para seguir vendiéndola a otros actores de la cadena.

Por aparte, Celeste Soto, directiva de la Asociación de Recolectores, explica que ellos son recolectores de base que tiene permiso para ingresar a los vertedores, en este caso Amsa, pero para poder buscar y clasificar material reciclable, pero que no son contratados por ninguna entidad, sino que son trabajadores individuales.

Al vertedero en el kilómetro 22.5 llegan residuos sólidos de 32 municipios.

En un día de trabajo, si bien les va llegan a tener Q65 o Q70 de ingreso luego de su jornada al vender el material recolectado.

Comenta cómo les pagan quienes les compras los materiales para reciclar:

Según Soto, en ese vertedero hay cuatro empresas recicladoras que compran material y los pagos varían:

  • Por el plástico les pagan Q50, es decir Q0.50 por libra.
  • Nylón, Q0.40 por libra,
  • Plástico duro, a Q0.40 por libra
  • Papel, Q0.35 o Q0.40 por libra
  • Vidrio, Q0.20 la libra
  • Metales, o la chatarra Q0.25 la libra o Q25 quintal
  • Latas de bebidas a Q3 quetzales la libra
  • Latas (como las de frijoles o sardinas no las aceptan)

Sin embargo, están preocupados ya que con el Reglamento para la Gestión Integral de los Residuos y Desechos Sólidos Comunes, Acuerdo 164-2021, prácticamente se les estaría quitando el trabajo que representa el sustento familiar, por lo que solicitan al gobierno que los tomen en cuenta y busquen soluciones para estas miles de personas.

Incluso, una solución es impulsar una planta recicladora donde los recolectores puedan participar, concluyó.