El Gobierno de Guatemala denunció este 4 de noviembre un caso de presunta corrupción, denominado “Red Q”, que involucra al expresidente Alejandro Giammattei, al exjefe de la Secretaría General de Planificación y Programación de la Presidencia (Segeplan) y al expresidente del Instituto Nacional de Electrificación (INDE), Melvin Quijivix Vega.

Según las autoridades, durante el gobierno de Giammattei se creó una estructura que permitió el control del Consejo Directivo del INDE mediante la designación de una plaza “fantasma” en Segeplan, diseñada específicamente para Quijivix. Dicha plaza, aprobada por el expresidente Giammattei, le permitió a Quijivix acceder al Consejo Directivo del INDE y asumir la presidencia en 2022.

De acuerdo con el auditor del INDE, Jorge García, la llegada de Quijivix al Consejo Directivo generó un aumento en el presupuesto de la institución, junto con la contratación de asesorías a empresas vinculadas a él.

Según la información supuestamente se destinaron Q8.6 millones a 17 consultorías, algunas de ellas a la empresa Mine, S.A., que habría recibido Q1.5 millones y cuyo domicilio fiscal coincide con la residencia de Quijivix. Otra empresa beneficiada, Parime S.A., recibió Q1.8 millones y está registrada a nombre de familiares de Quijivix.

El Gobierno presentó denuncias penales contra el expresidente Giammattei por abuso de autoridad, tráfico de influencias e incumplimiento de deberes, argumentando que su respaldo permitió la creación de la plaza en Segeplan para Quijivix. Además, se acusa al exjefe de Segeplan y a Quijivix de delitos adicionales, como peculado, fraude y nombramientos ilegales.

Para avanzar con las acusaciones contra Giammattei, quien actualmente goza de inmunidad por ser diputado del Parlamento Centroamericano (Parlacen), las autoridades deberán presentar una solicitud formal de retiro de antejuicio.

Redacción: Digital