En 2025 se espera que el 90% del contenido en línea sea generado por IA y cómo afecta esto la percepción de belleza

En 2025 se espera que el 90% del contenido en línea sea generado por IA y cómo afecta esto la percepción de belleza

Nos vemos a través de filtros y herramientas que cambian la percepción de la realidad y esto influye en el diario vivir, en especial en niñas y adolescentes.
10/07/2024 05:00
Fuente: Prensa Libre 

Tecnología

En 2025 se espera que el 90% del contenido en línea sea generado por IA y cómo afecta esto la percepción de belleza

Nos vemos a través de filtros y herramientas que cambian la percepción de la realidad y esto influye en el diario vivir, en especial en niñas y adolescentes.

¿A quién queremos parecernos…cuáles son nuestros ideales de belleza con la tecnología? Preguntas y cuestionamientos importantes en la nueva era de filtros y herramientas digitales. (Foto Prensa Libre: Andrea Piacquadio/Pexels)

Hoy como entretenimiento tenemos diversos filtros y herramientas que permiten cambiar realidades, convertirnos en personajes divertidos, tener un corte de cabello en segundos o conocer cuál es el mejor maquillaje con un clic y el apoyo de la inteligencia artificial (IA). Pero, estas soluciones tecnológicas cambian nuestra manera de ver el mundo.

La marca Dove este año cumplió dos décadas de su campaña llamada por la Belleza Real. A principios del siglo solo 2 por ciento de mujeres se sentía bella.

Este 2024 presentó un nuevo estudio en el que se llegó a cerca de 33 mil personas en 20 países distintos y con el apoyo de expertos académicos en el campo de la imagen corporal.

De acuerdo a este informe global, El Estado Real de la Belleza, Dove encuentra que 2 de cada 5 mujeres estarían dispuestas a renunciar a un año de su vida para lograr una apariencia o cuerpo ideal.

El estudio muestra que, si bien los ideales de belleza se han diversificado a lo largo de los años, la lista de requisitos está creciendo y es imposible de cumplir: desde lucir saludable (76%) hasta ser delgada (68%), tener una cintura pequeña (64%) y también ser curvilínea (57%). 2 de cada 3 mujeres creen que hoy en día se espera que las mujeres sean físicamente más atractivas que la generación de sus madres.

“La distorsión generada por las redes sociales con respecto a la percepción de nuestro cuerpo nos lleva a normalizar la insatisfacción constante con nuestra apariencia. Los microtrends de belleza en estas plataformas perpetúan esta insatisfacción, ya que siempre hay algo que cambiar o mejorar para ajustarse a esas tendencias en evolución. Las mujeres sienten presión por lucir como en las redes sociales, aunque son conscientes de que esas imágenes suelen ser irreales. Es fundamental fortalecer a las personas con una serie de recursos que les ayuden a mejorar su autoestima y percepción corporal en cada etapa de su vida, lo que les permitirá cuestionar los estándares de belleza establecidos y desarrollar una mayor conexión y agradecimiento con sus cuerpos”, indicó la guatemalteca Claudia Cuyún, psicóloga clínica y magister en cáncer y salud mental.

Y es que, según el estudio, se espera que para el 2025 el 90% del contenido en línea sea generado por IA. Sin duda alguna, una de las mayores amenazas para la representación de la belleza real es la Inteligencia Artificial; 9 de cada 10 mujeres y niñas dicen haber estado expuestas a contenido de belleza dañino en línea. Y,1 de cada 3, sienten presión para alterar su apariencia debido a lo que ven en línea, incluso cuando saben que es falso o generado por IA.

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¿Cómo aceptar nuestra realidad?

Cuyún insiste en que la tecnología aunque es importante y nos facilita recursos y conocimientos nos hace entrar en divergencia entre lo que realmente es y lo que deseamos parecer.

“Nosotros somos esa persona que se levanta, se baña y lo que vemos en el espejo con nuestra manera de ser, de pensar, sentir y actuar”, dice la psicóloga. A veces caemos en distorsionar nuestro pensamiento sobre nosotros, por ejemplo, los cambios del cuerpo después de un embarazo a veces deja una pequeña bolsa abajo de nuestro estómago que es difícil de eliminar, aparecen estrías en algún momento de la vida, arrugas y otras cuestiones que son parte de diferentes edades y es importante aceptarlas.

Las mujeres al no aceptar su cuerpo y la etapa que vive puede caer en dos grandes problemáticas como la depresión y la ansiedad, agrega Cuyún. “Esa aceptación es también darse cuenta de aquello valioso, como las cosas que podemos hacer desde las más sencillas de caminar, respirar o correr hasta aquellas en las que nos cultivamos”, indica la psicóloga.

Es importante evaluar si para fortalecer ese amor propio podríamos necesitar apoyo psicológico. Cuyún agrega que “todos necesitamos ayuda en ocasiones incluso los psicólogos, en las mujeres el asistir a terapia podría ser una decisión importante cuando reconocemos que existe un autocastigo por la falta de aceptación personal, cuando nos hablamos mal todo el tiempo o cuando nuestra percepción de la realidad cambia”.

Aceptar nuestro cuerpo y nuestra edad es fortalecer el amor propio. (Foto Prensa Libre: João Camargo/Pexels)

Parte de esa dinámica es descubrir quién o qué nos ha hecho pensar conceptos como la fealdad, críticas por el peso u otras ideas que han dañado la autoestima, al identificarlas es posible tomar responsabilidad, quitar esas percepciones y empezar a aceptarnos.

Cuyún hace una reflexión que como madres es importante cuidar los discursos frente a los hijos. “Cuando los niños y niñas escuchan que mamá se siente gordita, que se van a hacer operaciones o están demasiado tiempo sin orientación en redes sociales u otros medios de comunicación, podrían querer seguir modelos de vida irreales”, dice Cuyún.

Otra recomendación es no dar dispositivos a los más pequeños en sus primeros dos años y luego de ese tiempo mientras crecen monitorear el tiempo que están usando los teléfonos y computadoras y que estén en los límites saludables y bajo la supervisión de un adulto. De igual manera evitar que duerman con los teléfonos.

A cierta edad es ideal que los niños y adolescentes ahorren para pagar con parte de sus mesadas el servicio telefónico e internet para que empiecen a comprender el valor de esos servicios, agrega Cuyún.