De la misma forma como sucedió con el exdirector de informática del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Jorge Santos y el ex subsecretario privado de la presidencia, Wuilliam Capriel, el juez A del Juzgado Séptimo Penal, Fredy Orellana, envió a juicio al abogado Eduardo Masaya por el delito de falsedad ideológica en forma continuada, por supuestamente avalar firmas en las hojas de adhesión de afiliados al partido Movimiento Semilla sin que le constara la presencia de los firmantes.

Según la resolución de Orellana, su decisión fue basada en declaraciones que siete sindicados anteriores dieron cuando fueron condenados bajo el procedimiento de aceptación de cargos dentro del caso. De acuerdo a su decisión, se estableció que existió todo un andamiaje para colocar firmas falsas y así sustentan que la agrupación política podría tener un número de afiliados aceptables ante el TSE.

Aunque la defensa reiteró que los hechos pronunciados por el Ministerio Público (MP) contra Masaya estaban fuera de contexto, ya que se aseguraba que, las presuntas acciones delictivas de Masaya habían sido realizadas para afectar el proceso electoral, el defensor del abogado aseguró que las fechas no coincidían, pues dicho proceso electoral no estaba vigente en el momento en el que se presume Masaya actuó a favor del partido Movimiento Semilla.

#AhoraLH | En su argumentación, el juez Fredy Orellana señala que muchos de los hechos que hoy se le acusa a Masaya están basados en las siete aceptaciones de cargos registradas dentro del caso Semilla.

Asimismo, señala las acusaciones contra Cinthya Rojas, otra integrante de… pic.twitter.com/LLRMaXoeV8

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Por su parte, Orellana aseguró que había suficiente razón para enviarlo a un debate oral y público, y que sea el Tribunal Séptimo de Sentencia Penal, el que se encargará de decidir si este es inocente o no de los cargos.

RESOLUCIONES HECHAS

Al salir de la audiencia, Masaya señaló, que no le causaba sorpresa la decisión de Orellana, pues a su criterio, este se ponía previamente de acuerdo con el MP para emitir, las resoluciones. «No hay ninguna sorpresa en cuanto a la resolución que emite este, pues ya sabemos que trae las resoluciones previamente escritas», señaló.

Así mismo, aseguró que el cambio de prisión que Orellana ordenó, en su contra, era un acto de tortura, pues supuestamente con esta acción se busca «obtener un resultado judicial» acorde a los intereses del MP en este caso, recalcó. «Sí, eso no es un acto de tortura, entonces no sé qué es», afirmó.

POSIBLE ERROR CON QUERELLANTES

Durante la audiencia, la defensa de Masaya señaló que existió un error al momento de la presentación de los querellantes adhesivos al caso, donde figura el abogado Fernando Linares Beltranena.

Según explicó el defensor, la ley establece que previo a que el MP realice su acusación contra un sindicado, los querellantes deben solicitar ser adheridos al caso de forma permanente situación que en este proceso no se dio, por lo que el defensor advirtió a Orellana de este vicio considerando que el tiempo ya había pasado y que ya no se podía aceptar la petición de los querellantes y por ende estos debían quedar fuera.

No obstante Orellana, reclamó al abogado por la interrupción que se hizo a su alocución y aseguró que si no le había dado la palabra a los querellantes estos aún no podían hacer la petición que el defensor reclamaba, por lo tanto, interrumpió una vez más al abogado y procedió con audiencia, situación que sirvió para que los querellantes subsanaran su error y así solicitar al juez ser parte permanente dentro del proceso, quien finalmente se los concedió.

#AhoraLH l Defensa de Eduardo Masaya advierte de error en el proceso, pues los querellantes no solicitaron en el debido tiempo su incorporación definitiva al proceso, pero el juez Fredy Orellana le reprocha la interrupción.

📹: Fabricio Alonzo/LH
✍️: Sergio Osegueda/LH pic.twitter.com/vMOmWRA3GR

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«VERDUGO COBARDE»

A la audiencia se presentaron los diputados Diego Toledo y Samuel Pérez, sin embargo, les fue prohibido el ingreso a la sala, según el juez Orellana determinó que la reserva se había levantado únicamente para que los medios de comunicación estuvieran presentes en la misma y no personas ajenas al proceso.

Esta aseveración se hizo dos veces dentro de la audiencia, por lo que ordenó a los guardias del Organismo Judicial cerrar la puerta para evitar que los diputados, que se encontraban en el exterior, escucharan lo que sucedía dentro de la misma.

«Yo lo que vi es un verdugo cobarde», expresó Pérez tras concluir la audiencia. Así mismo, el diputado indicó «es un cobarde, me menciona, pero me cierra la puerta».

Samuel Pérez ha sido mencionado dentro del caso como una de las personas que supuestamente avaló la ubicación de las supuestas firmas falsas en las hojas de adhesión del partido Movimiento Semilla junto a Cinthia Rojas, contra quien pesa una orden de captura en su contra que no ha sido ejecutada derivado que esta se encuentra exiliada.

Hasta el momento, Pérez tiene un proceso de antejuicio en su contra por este caso.