“Un ejército victorioso gana primero y entabla la batalla después; un ejército derrotado lucha primero e intenta obtener la victoria después”. Sun Tzu en El arte de la guerra.

Guatemala, Centroamérica y Latinoamérica se encuentran en una guerra desde hace algún tiempo, luchando contra enemigos que no tienen cara visible o bandera nacional, pero que resultan mucho más peligrosos: la izquierda, la falta de principios, la búsqueda de poder para beneficio individual. En los últimos años, hemos visto cómo poco a poco los países de la región sucumben ante el enemigo y ello genera una gran preocupación por el futuro del país.

Al evaluar países como Chile, que teniendo crecimiento económico y desarrollo arriesgan su futuro por poner la mirada en un modelo evidentemente fallido, deja mucho que pensar. Sobre todo, uno se pregunta, ¿cuándo se debió tocar la alarma para que la gente se diera cuenta del tremendo incendio y crisis de país que se les vendría encima si no se actuaba al respecto? O, ¿cómo permitieron que el agua de la olla se fuera calentado internamente hasta llegar a estallar?

La frase de Sun Tzu resulta útil, ya que como guatemaltecos debemos darnos cuenta que para salir victoriosos debemos hacer los cambios ahora, y no esperar la batalla directa y frontal que vendrá después. Es alarmante que veamos cómo mensajes populistas y de izquierda calan en la población, cómo grupos al margen de la ley empiezan a fomentar la ingobernabilidad y mueven masas con mentiras. Es impresionante cómo se usa el poder externo para manipular mensajes erróneos con el objeto de generar todo lo contrario a la prosperidad. Las personas se corrompen por buscar un beneficio individual y dejan a un lado la búsqueda de un verdadero bienestar para los guatemaltecos.

El enemigo está cerca, pero como dice el refrán, “guerra avisada no mata soldado”. Los guatemaltecos que genuinamente amamos este país, que invertimos en él y que queremos que nuestros hijos crezcan en él debemos estar dispuestos a pelear las batallas para salir victoriosos. Tocará defendernos de acusaciones infundadas, resistir presiones y ser valientes. Para ganar la guerra, debemos ser muchos los valientes y es por ello que hago el llamado a unirnos desde hoy. Este año se llevan a cabo procesos importantes para el país, como la elección del próximo fiscal general de Guatemala. Informémonos del proceso y exijamos que el mismo sea transparente y libre de presiones, ya que contar con un sistema de justicia independiente es clave para el fortalecimiento institucional del país. De igual forma, las elecciones generales del 2023 definirán el futuro de Guatemala para los cuatro años siguientes y no tardaremos en empezar a ver cómo se empiezan a mover propuestas y narrativas políticas en contra del desarrollo.

Estoy seguro, amigos lectores, que cada uno de ustedes quiere una mejor Guatemala, donde podamos desarrollar nuestras vidas y nuestros negocios con mejores condiciones. Si defendemos principios, promovemos una cultura de integridad y pensamos en el prójimo, estaremos avanzando como sociedad. Tengamos ánimo, fuerza, coraje y unión. Como diría Sun Tzu, “si tú y tus fuerzas están con ánimo y ellos desmoralizados, entonces, aunque sean más numerosos, puedes entrar en batalla”. En cada uno de ustedes está que salgamos victoriosos.