TGW
Guatevision
DCA
Prensa Libre
Canal Antigua
La Hora
Sonora
Al Día
Emisoras Unidas
AGN

¿Cómo impactan las malas carreteras en el turismo?
¡Toma tres horas recorrer 40 kilómetros!
Enlace generado
Resumen Automático
El feriado del 15 de agosto, Día de la Asunción, ¿cuánto tiempo hiciste a la Antigua, al puerto, a Río Dulce, a Esquipulas, etc.? Exclamamos, unos y otros, con incredulidad: ¡3, 4, 5, hasta 8 horas! Independientemente del momento en que elegimos salir de la capital para disfrutar de algún sitio bello en nuestro país, muchos guatemaltecos pasamos demasiado tiempo atrapados en el carro.
Peligran las inversiones en el sector turístico.
Circulando a vuelta de rueda por las intrincadas rutas que recomienda Waze, me asaltó una gran preocupación por todos los compatriotas empleados en el sector turístico. Según Inguat, ascendía a 315 mil 979 personas en 2023. Con orgullo, se pronosticó un influjo de 3.4 millones de turistas extranjeros para 2025, así como un alza en el turismo interno. Desde el Inguat, Harris Whitbeck y su equipo cosechan éxitos promocionando al país en el extranjero. Movidos por estas señales positivas, visionarios emprendedores han arriesgado sus ahorros para montar comedores, restaurantes, turicentros, hoteles y otros tipos de alojamiento. Han abierto tiendas de artesanías, pequeños museos y senderos ecológicos. Han colocado puestos de frutas a la orilla de la carretera. Otros ofrecen sus servicios como guías turísticos y transportistas. Estas inversiones peligran debido al mal estado de los puertos, aeropuertos y carreteras.
Comparemos. El aeropuerto de Narita está a 60 kilómetros de Tokio, el aeropuerto JFK está a 45 kilómetros de Manhattan, y el aeropuerto de Heathrow está a 32 kilómetros de Londres. En los tres ejemplos anteriores, los visitantes suelen demorar alrededor de una hora para llegar a su hotel ubicado en el centro de la ciudad. En ciudades como estas, los visitantes pueden optar por desplazarse en tren, subterráneo o bus público, si la congestión vehicular es extrema.
Entre 2 a 4 kilómetros separan La Aurora de los principales hoteles en la Zona Viva, ¡y puede tomar más de una hora acercarse a ese vecindario en hora pico! Después de un vuelo transatlántico, debe ser extremadamente cargante pasar 3 horas en un carro para recorrer 40 kilómetros rumbo a la Antigua, o más de 4 horas hasta llegar al afamado lago de Atitlán, a 137 kilómetros de distancia.
Presumimos de nuestros microclimas y de la corta distancia entre el Altiplano, la bocacosta y la selva petenera. Pero los lugares que están físicamente próximos terminan sintiéndose lejanos. Los retrasos provocados por la deteriorada infraestructura amargan la experiencia del turista y lo fuerzan a acortar sus estadías, reducir sus recorridos o elegir destinos alternativos como Costa Rica o México.
Las carreteras privadas bien cuidadas, como la VAS, agilizan la circulación, pero inevitablemente los viajeros caen en cuellos de botella provocados por hoyos y grietas en el asfalto, puentes intransitables, derrumbes, retenes en ubicaciones inverosímiles, intersecciones mal gestionadas, accidentes y bloqueos. Un poco de buena voluntad y creatividad solucionarían algunos de estos problemas, mientras que otros son más complejos y caros de remediar.
Modernizar la infraestructura no es solo una cuestión de comodidad, es una inversión estratégica que traería beneficios generalizados. Un sistema de carreteras modernas, así como alternativas viables para la movilidad aérea, acuática y más, harían posible que más visitantes disfruten de la riqueza del país, que se amplíe la estadía promedio y que los beneficios económicos lleguen a más comunidades.
¿Cuánto pierde Guatemala por no estar a la altura de su propio potencial turístico? La respuesta se mide en empleos que no se crean, en negocios que no prosperan y en divisas que otros países sí captan.