“El agente nos tiraba y daba puñetazos”: informe revela abusos verbales y físicos a niños migrantes detenidos por la CBP
Un informe presentado recientemente por la organización sin fines de lucro Proyecto Florence para los Derechos de los Migrantes y Refugiados (Florence Project), reveló la existencia de más de 300 casos de abusos verbales y físicos hacia niños migrantes no acompañados, cometidos por agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos (EE. UU.). El informe, […]
Un informe presentado recientemente por la organización sin fines de lucro Proyecto Florence para los Derechos de los Migrantes y Refugiados (Florence Project), reveló la existencia de más de 300 casos de abusos verbales y físicos hacia niños migrantes no acompañados, cometidos por agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos (EE. UU.).
El informe, presentado en septiembre pasado y llevado a cabo en centros de detención federales de Arizona, entre el 1 de enero del 2023 al 31 de marzo de 2024, dice que Guatemala está entre los países de los que más niños llegan a la frontera sur de EE. UU., junto con menores de México, Ecuador, Colombia y Venezuela.
De acuerdo con datos de la oficina de Aduanas y Control Fronterizo de EE. UU., (CBP, en inglés), en el año fiscal que recién concluyó el pasado 30 de septiembre fueron detenidos 29 mil 737 menores de edad guatemaltecos en la frontera sur, que viajaron sin ninguna compañía.
El número es menor al del 2023, cuando las detenciones de este grupo de connacionales sumaron 49 mil 463. En cuatro años, casi 200 mil niños, niñas y adolescentes no acompañados originarios de Guatemala fueron aprehendidos por las autoridades estadounidenses, este país encabeza el listado.
ABUSOS
El informe recopiló 314 “quejas” de menores a quienes pudo entrevistar. Dentro de los hallazgos destacan denuncias de niños pequeños por “tratos inhumanos, incluidos abusos verbales, frío extremo y separación de sus cuidadores y hermanos”.
En tendencia:
Caso Terry: A esto se enfrenta la presunta agresora, según la Ley de Protección Animal
Primera vivienda a precio accesible: El nuevo fondo millonario creado por Bernardo Arévalo
Esto dice el Insivumeh sobre las condiciones del clima para esta semana
Corre y va de nuevo, exalcalde de Tucurú enfrenta a los tribunales por cuarta vez
Esto dicen sobre el impulso de Allan Rodríguez a Adim Maldonado para presidir junta directiva del Congreso
“El agente nos agarraba, tiraba al suelo y pegaba puñetazos. El mismo agente agarraba a la gente por el cuello de la camisa y tiraba hacia él. El peor momento fue cuando empujó a un hombre adulto en la nuca y cayó al suelo”, recoge uno de los testimonios.
Otro de los hallazgos dice que 37 menores no acompañados revelaron haber sufrido abuso físico. “Los agentes de la Patrulla Fronteriza están aprovechando su posición de poder para intimidar a los niños y hacerles daño físico”, dijo Camille Auer, asistente legal del Proyecto Florence. Añadió que los niños sienten temor de denunciar a los agentes.
Entre otros abusos, el informe detalla que los guardias fronterizos hacían tropezar a los niños a propósito y los jalaban de sus chaquetas mientras caminaban. Al menos un agente sacó su arma para asustar a todos y obligarlos a hacer fila y la utilizó para decirle a un niño que se callara.
Además, un agente golpeó en el ojo a un muchacho de 15 años que luego se quedó con problemas de visión, mientras que otro esposó, gritó y pateó a un joven de 17 años.
ABUSOS VERBALES
Otro hallazgo presentado en el informe dice que los guardias de la CBP “siguen abusando verbalmente de los niños inmigrantes con regularidad”. Casi cuatro de cada 10 aseguraron haber sufrido este tipo de abuso.
El documento recoge el testimonio de un niño, según el cual, un agente de la CBP le recriminó: “¿Por qué estás aquí? Este no es tu país. Vete. M… —dijo al niño— regresa a México”.
En total, 115 menores de edad no acompañados dijeron haber sido víctima de este tipo de abuso. Proyecto Florence detalló que “lleva años denunciando abusos verbales”. En 2022 reveló que 85 niños habían sido víctimas. Los abusos también incluyen insultos racistas, humillaciones y amenazas de ser enviados a la cárcel.
SIN ATENCIÓN MÉDICA
Asimismo, de acuerdo con el informe, se detectaron casos en los que se les negó a los menores no acompañados atención médica y se ignoraron las peticiones de ayuda más simples.
“Muchos niños denunciaron que los agentes los ignoraron cuando tenían dolor y que se les negó atención médica básica y productos de higiene, poniendo en riesgo su salud”, detalla el informe.
Entre otros testimonios, según los niños entrevistados, está el que los agentes amenazaron a una joven de 17 años que padece de asma con quitarle la medicina. Otra niña escuchó que un guardia le dijo a su amiga, que padece ansiedad, que no la llevarían con el médico cada vez que sintiera ataques de pánico.
También dieron a conocer el caso de un niño de 13 años que tenía una herida profunda en la rodilla y que sangraba y que nadie le proporcionó atención médica ni suministros para limpiarse y curarse.
CONDICIONES INHUMANAS
Un siguiente hallazgo dice que los menores padecen “condiciones inhumanas”, pasan hambre y no tienen productos de higiene, deben soportar temperaturas “extremadamente frías” y permanecer detenidos junto con adultos.
Los testimonios de los niños y niñas que recoge el informe detallan que debieron dormir sin chumpa o suéter, en el suelo. Otros dicen que la comida que les dieron estaba congelada y ni siquiera se podía morder.
Otra adolescente relató que la mantuvieron con adultos y que en ese tiempo solo le dieron una botella de agua.
Finalmente, otro hallazgo se refiere a que los menores de edad fueron retenidos más de 72 horas, que es el tiempo establecido en la ley, lo cual es “una violación directa de las leyes”.
“Los centros de detención de la CBP no están diseñados para alojar a los niños durante estos períodos excesivos de tiempo. El tiempo excesivo que pasan en entornos de detención inadecuados facilita el abuso y es perjudicial para el bienestar psicológico y emocional de los niños”, señala al respecto el informe.
RECOMENDACIONES
Proyecto Florence recomienda sancionar, reformar o reemplazar la Oficina de Responsabilidad Profesional de la CBP y la Oficina de Derechos y Libertades Civiles por haber “fracasado en investigar y abordar el abuso y maltrato sistemático de niños migrantes no acompañados”.
En 2024, más de 6 mil menores migrantes han sido retornados desde México y EE.UU.
También eliminar las excepciones de ley que permiten que los menores estén bajo custodia de la CBP más de 72 horas, y contratar profesionales para evaluar la protección de los niños y garantizar la atención adecuada y la no separación familiar.
De igual forma recomiendan al Congreso de EE. UU. o alguna entidad independiente designada por el gobierno federal hacer una investigación sobre la “cultura desenfrenada de abuso de la CBP”. En este sentido, cabe destacar que este no es el primer informe que recopila relatos de menores de edad que han sido víctimas de abusos físicos y verbales.
Por último, también recomienda aumentar la responsabilidad individual de los agentes fronterizos y tener bajo control estricto a cada uno de ellos que va a interactuar con un niño. “Se le debe exigir que informe su nombre y ubicación en el formulario I-213 para aumentar su responsabilidad”, señala el documento.
POSTURA
La CBP respondió a La Hora que la institución está «comprometida con la protección y el bienestar de los niños», y dijo que publicó nuevas directrices en las que se ha centrado en el bienestar de los menores bajo su custodia.
«El CBP ha adoptado amplias medidas para ampliar y mejorar significativamente sus esfuerzos de apoyo médico tanto en alcance como en escala para las personas bajo custodia, especialmente las poblaciones vulnerables como los niños», detalló en la comunicación, vía correo electrónico.
Aseguró que todas las instituciones de la CBP ofrecen servicios integrales en donde el personal da servicios humanitarios como lavandería, alimentación, cuidado de niños pequeños no acompañados y cuidado médico. Asimismo, indicó que ha mejorado la formación sobre las políticas de detención y que siguen trabajando para «garantizar la seguridad y el bienestar de los niños y las poblaciones vulnerables» bajo su custodia.
PROTOCOLOS
La institución explicó que, según los protocolos, los menores no acompañados son los primeros en ser atendidos cuando los agentes fronterizos tienen encuentros con migrantes que ingresan sin autorización a EE. UU. y se aseguran de que estén en buenas condiciones de salud.
Reconoció que, en ocasiones debido a incrementos de la llegada de migrantes «desafortunadamente los niños están bajo custodia de la CBP durante más de 72 horas». La estadía prolongada muchas veces también depende de que las otras agencias del Gobierno de EE. UU. encuentren espacio para ubicarlos en sus refugios.
Pero, mientras están bajo custodia de la CBP «el personal debe cuidar a los menores de manera coherente» con las leyes estadounidenses y aseguró que, de acuerdo con las políticas de la institución, con «limitadas excepciones» las que se toma la decisión de separara los menores de los adultos que viajan con ellos.
«Los agentes y oficiales de la CBP observan signos de problemas de bienestar infantil y toman las medidas apropiadas. Además, la CBP tiene profesionales médicos en sus instalaciones que están capacitados para reconocer, responder y remitir problemas de bienestar infantil», detalló.
Agregó: «El DHS —Departamento de Seguridad Nacional, en inglés— está poniendo en marcha el Programa de Bienestar Infantil, que pretende integrar en las instalaciones del CBP a profesionales de la salud mental con licencia y experiencia y a especialistas en bienestar infantil».