Los costos de unirse a la OTAN de Finlandia y Suecia
Tal como refería en mi anterior artículo, ya han aparecido notas que muestran la delicada situación que ha provocado la posición otrora neutral de los países escandinavos –en este caso lo relativo a Finlandia y Suecia–, pero que, derivado de su incorporación a la OTAN, ha puesto, según fuentes noticiosas, a ambos países en alerta, […]
Tal como refería en mi anterior artículo, ya han aparecido notas que muestran la delicada situación que ha provocado la posición otrora neutral de los países escandinavos –en este caso lo relativo a Finlandia y Suecia–, pero que, derivado de su incorporación a la OTAN, ha puesto, según fuentes noticiosas, a ambos países en alerta, lo cual se ejemplifica con el hecho de que actualmente han estado enviando mensajes a su población para prepararse con respecto los temores de una potencial guerra.
Esta situación muestra con crudeza, las implicaciones que ha significado para ambos países haberse retirado de su antigua desalineación con la OTAN para incorporarse a la misma, a raíz de la invasión de Rusia a Ucrania, una situación que les provocó el temor correspondiente, puesto que sus fronteras con Rusia, les hace vulnerables a un ataque de esta nación.
Sin duda, que los costos de una alineación con la OTAN son elevados, los cuales se hacen más altos con el hecho que Donald Trump haya ganado las elecciones en Estados Unidos y que el partido republicano haya tomado control del Congreso y del Senado estadounidense, lo que significa que Trump cuenta con el apoyo de ambos poderes en sus decisiones.
Las noticias de ayer por parte de Swissinfo.ch indican: “Suecia comenzó este lunes a enviar panfletos a sus ciudadanos, instándoles a prepararse para la posibilidad de una guerra, mientras que Finlandia lanzó un sitio web que recopila consejos útiles en caso de conflicto.
“Ambos países abandonaron décadas de no alineamiento militar para unirse a la OTAN tras la invasión rusa de Ucrania en 2022. Desde que estalló la guerra entre Rusia y Ucrania, Suecia ha instado repetidamente a su población a prepararse mentalmente y logísticamente ante la posibilidad de una guerra”.
“Un folleto titulado «Si llega la crisis o la guerra», distribuido por la Agencia Sueca de Contingencias Civiles (MSB), reúne consejos sobre cómo prepararse para emergencias como guerras, desastres naturales o ciberataques”.
Esta situación de generar y proveer información a su población, aunque no es una cuestión nueva, puesto que durante la Segunda Guerra Mundial se hizo uso de este tipo de mecanismos, pero sí muestra con meridiana claridad que los temores de un ataque de cualquier tipo, se encuentra contemplado en las agendas de seguridad de ambos países.
Suecia no tiene frontera terrestre con Rusia; pero Finlandia sí y se encuentra en medio de ambos países, pero Suecia si tiene una frontera marítima con el enclave de Kaliningrado y comparte el mar Báltico, de importancia estratégica para Moscú.
En lo que se refiere a Suecia, la fuente refiere: “Se trata de una versión actualizada de un documento que Suecia ha publicado cinco veces desde la Segunda Guerra Mundial. La situación de seguridad es grave y todos necesitamos fortalecer nuestra resiliencia para enfrentar diversas crisis y, en última instancia, la guerra», dijo el director de MSB, Mikael Frisell, en un comunicado”.
MSB indicó que la versión actualizada se centra más en la preparación para la guerra. “…en las próximas dos semanas se enviarán más de 5 millones de folletos a los hogares suecos. “
“Por su parte, Finlandia, que comparte una frontera de 1,340 kilómetros con Rusia, lanzó este lunes un sitio web con consejos sobre cómo prepararse para diferentes tipos de crisis”.
Aunque ambos países cuentan con una fuerza armada importante, la misma es mucho menor a los países de reconocida trayectoria armamentística como Alemania, Francia o Inglaterra. En todo caso, lo que se puede observar que ingresar a la OTAN más que beneficiar a estos dos países escandinavos, los coloca de frente ante un potencial conflicto mayor que expone seriamente a su sociedad, pero seguro el temor que provocó la invasión a Ucrania, abrió una presión mayor a Suecia y Finlandia para alinearse a la OTAN y abandonar su posición pacifista y neutral de antes.
Ojalá que el conflicto de Rusia y Ucrania o la terrible e inhumana intervención de Israel en Palestina, ni la posición obtusa de Trump, provoquen la apertura de un conflicto bélico de largas proporciones para la humanidad, sería una catástrofe mundial.