TGW
Guatevision
DCA
Prensa Libre
Canal Antigua
La Hora
Sonora
Al Día
Emisoras Unidas
AGN

Calor en Guatemala se agrava por efectos del cambio climático, advierten expertos
El cambio climático es el principal detonante de las altas temperaturas que se han registrado en el último año en el país, poniendo en riesgo el medio ambiente, la vida humana y de distintas especies en el país.
Enlace generado
Resumen Automático
Durante el último año, Guatemala ha experimentado un incremento considerable de la temperatura, según información contenida en el informe El Cambio Climático, presentado recientemente por la Atribución Meteorológica Mundial (WWA, en inglés).
En dicho estudio se detalla que, del 1 de mayo del 2024 al 1 de mayo del 2025, Guatemala registró un total de 122 días con altas temperaturas, de los cuales 95 se atribuyen al cambio climático que afecta a nivel global.
Según expertos consultados, el incremento de la temperatura en el país durante los últimos años se debe a los efectos del cambio climático, lo cual afecta los diferentes ecosistemas y hábitats de distintas especies del país, poniendo en riesgo no solo su vida, sino también la de los humanos.
El doctor José Moreira, biólogo que forma parte de la Sociedad para la Conservación de la Vida Silvestre (WCS), organización internacional que también se dedica a la conservación de los ecosistemas naturales, afirma que el aumento de la temperatura no es solo un fenómeno nacional, sino global. Este ha provocado un aumento de la sequía en distintos puntos del país, lo que provoca un impacto directo en los cultivos, esenciales para la vida y subsistencia humanas, ocasionando una disminución en las cosechas, como consecuencia del cambio climático.
París Rivera, experto de la Unidad de Meteorología de la Universidad Mariano Gálvez, explica que el aumento del calor en el país es un efecto evidentemente meteorológico, influenciado por el cambio climático.
Según estudios realizados por la unidad, el fenómeno que influye en el incremento del calor en el país puede describirse como un domo de calor, ubicado entre los niveles medios y altos de la atmósfera terrestre. Esta situación impide el flujo libre de aire fresco, causando la retención del calor y, con ello, el aumento de las temperaturas.
Peligro para la flora, fauna y vida humana
Datos proporcionados por el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap) advierten que el aumento de la temperatura en todo el territorio nacional pone en riesgo no solo a los habitantes, sino también a la flora y fauna existentes en diversas regiones. El incremento de las temperaturas ocasiona sequías y deteriora los mantos acuíferos, como ríos y lagos, vitales para la conservación de la vida de distintas especies, ya que, al desaparecer estas fuentes de agua, las especies se ven obligadas a migrar, con el riesgo de extinguirse.
Asimismo, plantas, árboles y vegetación resultan perjudicados por la sequía, ya que la prolongación de las temporadas calurosas disminuye las lluvias, esenciales para la supervivencia de selvas y bosques.
No solo las especies terrestres están en riesgo, sino también la vida marina. En el océano Pacífico se presentan problemas con las rutas migratorias de especies como las tortugas marinas. “El calentamiento de los océanos altera los ciclos de vida de especies que dependen de estas cadenas alimenticias, poniendo en amenaza su supervivencia al reducirse el acceso a los alimentos”, afirma Moreira.
El experto indica que el ciclo reproductivo de estos reptiles se ve afectado, ya que el exceso de calor en las playas, durante la incubación de los huevos, provoca un aumento en el nacimiento de hembras. En cambio, temperaturas más moderadas permiten un equilibrio en el nacimiento de machos y hembras, vital para la conservación de la especie. “Las playas del Pacífico son cruciales para la reproducción de al menos cuatro especies de tortugas marinas”, asegura.
El 2023 fue confirmado como el más cálido en la historia reciente, según datos del Observatorio Europeo del Clima Copernicus, que indican un aumento de 1.48°C en la temperatura global promedio.
No obstante, estos parámetros han variado, con incrementos entre 0.1 y 0.2 °C, lo que ha intensificado la percepción del calor entre la población.
Estos patrones también se ven afectados por fenómenos como El Niño, que causa fuertes lluvias en algunas regiones, mientras que otras experimentan sequías y altas temperaturas, afirma París Rivera.
¿Qué podemos hacer?
Según Moreira, para conservar nuestros recursos naturales, así como la flora y fauna, tanto de especies terrestres como marinas, y mitigar los efectos del cambio climático, es necesario redoblar esfuerzos intersectoriales mediante alianzas dirigidas a la conservación, restauración y manejo sostenible de los recursos naturales, de los cuales también depende la vida humana.
“Tenemos diferentes sectores, desde empresas privadas, agroindustria, instituciones de gobierno, oenegés, que trabajamos con el fin de restaurar estos ecosistemas, y siempre colaborando con comunidades que tienen esas áreas a disposición, y que nosotros sabemos que son importantes para mantener el equilibrio y la parte de conservación de especies. Hablamos de esta parte que es de restauración, y también en su momento a nivel político. También la parte importante de actualizar políticas nacionales, por ejemplo, actualmente se está actualizando la Estrategia Nacional de Biodiversidad Biológica, que acá lo diré, era el Consejo Nacional de Áreas Protegidas, que es muy importante”, explicó.
“Debemos conservarlos para las generaciones actuales y futuras”, agregó el experto de la Sociedad para la Conservación de la Vida Silvestre.
Calor disminuyó en el último año
En cuanto al incremento del calor en el territorio nacional, el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) indica que, durante el presente año, las temperaturas han disminuido en comparación con las del año anterior.
César George, meteorólogo de la institución, afirma que durante este año las temperaturas más altas registradas hasta el mes de mayo, principalmente en el área de Petén, la Franja Transversal del Norte y el corredor seco, han alcanzado los 42 grados Celsius. Mientras que, en el 2024, durante el mismo período, las temperaturas más altas alcanzaron los 44.8 grados, por lo que descartan que este año puedan sobrepasar dicho rango, ya que a mediados de la semana se prevé el ingreso de varios sistemas de baja presión que ocasionarán lluvias en la mayor parte del territorio nacional, lo cual contribuirá a la disminución de las temperaturas.