Remesas en Guatemala, al filo del techo histórico y especialistas prevén una desaceleración en el 2026

Remesas en Guatemala, al filo del techo histórico y especialistas prevén una desaceleración en el 2026

Las divisas por remesas familiares en Guatemala mantendrán un crecimiento extraordinario en el 2025, aunque podrían desacelerarse en el último trimestre del 2026 o bien en el 2027, según especialistas.

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08/09/2025 00:10
Fuente: Prensa Libre 

Por cuarto mes consecutivo, el ingreso de divisas por remesas familiares supera los US$2 mil millones mensuales, y con esta tendencia se podrían superar los US$24 mil 521.7 millones previstos para el cierre del 2025 o sea con un 14% de crecimiento.

Todo indica que en el segundo semestre del año habrá un incremento sustancial en los envíos, en comparación con lo observado en los primeros meses; es decir, se espera que las transferencias mantengan crecimientos de doble dígito.

De enero a agosto, Guatemala ha recibido un monto acumulado de US$16 mil 861 millones (unos Q129 mil millones), lo que marca una tendencia exponencial de crecimiento histórico.

Este monto representa una tasa de crecimiento del 19.5% en comparación con el mismo período del año pasado. Según analistas consultados, este fenómeno estaría asociado tanto a las medidas migratorias que implementan las autoridades de Estados Unidos como a la futura vigencia del impuesto a las transferencias, previsto a partir del 1 de enero del 2026.

En agosto ingresaron US$2 mil 368 millones, según el reporte de la balanza cambiaria.

Guatemaltecos anticipan retorno forzoso y envían más dinero

La administración de Estados Unidos continúa con una política de control migratorio, y algunos hechos que han circulado en las últimas semanas estarían generando un ambiente de prevención entre los guatemaltecos declaró Marcel Arévalo, director de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso).

Uno de estos hechos, señaló, son los planes del gobierno del presidente Donald Trump para deportar a niños guatemaltecos que llegaron solos a Estados Unidos y que actualmente están bajo custodia de las autoridades, por lo que “hay una alta cuota de niños guatemaltecos”.

Otro factor estaría relacionado con los guatemaltecos detenidos en Alligator Alcatraz y con el impuesto a las remesas, cuya entrada en vigor está prevista para el 1 de enero del 2026.

“Estos son hechos que perfilan y confirman la agudización de las políticas de control migratorio”, enfatizó un investigador de Flacso.

“Las personas incrementan sus envíos como medida preventiva, en previsión de un posible retorno forzoso, lo que ha llevado a una acumulación de remesas por parte de quienes anticipan la posibilidad de abandonar ese país”

Marcel Arévalo, director Flacso

También se ha registrado una drástica reducción del número de migrantes en los pasos fronterizos de EE. UU., “por lo que todo esto apunta a lo que se está viendo, y a que las familias y trabajadores que están allá sienten un temor creciente de ser deportados en cualquier momento”, agregó.

Bajo este contexto, las personas incrementan sus envíos como medida preventiva, en previsión de un posible retorno forzoso, lo que ha llevado a una acumulación de remesas por parte de quienes anticipan la posibilidad de abandonar ese país.

Remesas crecen por decisiones de retorno voluntario

En la lógica de los migrantes, anticipó Arévalo, no esperarían a ser detenidos, sino que ellos mismos podrían gestionar su proceso de retorno regular, una de las políticas que actualmente se impulsan y a las cuales algunas personas podrían estar acogiéndose.

“Si alguien se somete al retorno regular, envía todo su dinero y capital, lo que indicaría que ya tomó la decisión. Desconocemos cuántos guatemaltecos han decidido acogerse a este proceso. Son hechos que se visualizan y que podrían estar incidiendo en el envío de remesas”, apuntó.

En esos términos coincide Guillermo Díaz Castellanos, del Instituto de Investigación en Ciencias Socio Humanistas de la Universidad Rafael Landívar, quien señala que el aumento de las remesas en agosto está asociado al temor a la deportación.

Por ello, los migrantes evitan perder sus ahorros en EE. UU. y envían la mayor cantidad posible de dinero. Agosto fue el mes con más deportaciones, aclaró.

Flujo migratorio se conecta con repunte sostenido de remesas

Para el cierre del 2025 podría registrarse un mayor aumento en los envíos. Arévalo resalta que el discurso político sobre migración, presente desde la campaña del 2024, no tomó cuerpo en los primeros meses de este año, pero todo apunta a que en el segundo semestre habrá un incremento de retornos en distintas formas, lo cual estaría conectado con un aumento en los flujos migratorios.

De momento, no hay hechos que indiquen un crecimiento extraordinario en el volumen de transferencias, sino que responden a la cotidianidad. Sin embargo, no hay otros factores que expliquen claramente el aumento en el envío de remesas.

“Son los acontecimientos que enfrentan los migrantes regulares y no regulares los que les hacen percibir cada vez más el riesgo, y por tanto incrementan el envío de dinero, que es la causa fundamental de lo que se está observando”, enfatizó el director de Flacso.

Por su parte, Díaz prevé que se mantendrá la alta tasa de crecimiento; es decir, de dos dígitos.

Temor a deportaciones impulsa repunte de remesas

El economista Juan Alberto González Jacobo, experto en temas territoriales, explicó que se trata del denominado “efecto Trump”, por lo que persiste un ambiente de temor en varios estados. Algunos migrantes han salido hacia Canadá y otros se han trasladado a estados gobernados por demócratas para acogerse a las llamadas ciudades santuario, como medidas defensivas.

Ahora es muy probable que ese temor haya aumentado —apuntó— “porque se están dedicando esfuerzos importantes a crear un ambiente de inestabilidad en esas ciudades santuario. Esto está presionando el aumento de las remesas”.

No obstante, González Jacobo remarcó que se esperan mayores flujos, debido a los mecanismos de deportación que estarían aplicando las autoridades en EE. UU., lo cual coincide con lo planteado por Arévalo y presiona un aumento en los envíos, como los observados en agosto.

Temen fin del auge de las remesas

Para el 2026, se proyecta un ingreso por remesas de unos US$25 mil 747.1 millones. Ante este escenario, González Jacobo comentó que debe empezarse a crear una política de desarrollo orientada a convertir las remesas del consumo hacia la inversión, especialmente en proyectos de infraestructura como puertos, sistema ferroviario, carreteras, metro, modernización del aeropuerto e incluso en la adquisición de bonos del Tesoro que impulsa el gobierno.

“Con que solo se aumente la inversión en un 10%, se estarían movilizando varios miles de millones de dólares, con impacto económico, productivo y social, y podrían convertirse en una fuente de inversión por el efecto multiplicador que se genera con certeza en obras público-privadas. Las remesas benefician a más de seis millones de personas”, afirmó González Jacobo.

Díaz concluye que las remesas seguirán aumentando el próximo año, pero con una menor tasa de crecimiento, debido a dos factores: deportaciones y una menor emigración.

La tasa de crecimiento de las remesas disminuirá e incluso podría volverse negativa al cierre del 2026. Es decir, se registraría un menor monto. El “boom” de las remesas estaría llegando a su fin. El país debe prepararse para un choque externo en los próximos dos o tres años.