Llegar al Quinto Viernes de Cuaresma es centrarse en una de las imágenes de mayor arraigo y admiración por ser de las pocas en su género que se procesionan durante el tiempo cuaresmal.

En el centro de la ciudad, el Templo Histórico de San Francisco contiene una de las joyas icónicas del barroco guatemalteco, el Cristo de la Preciosa Sangre, que sale a las calles y avenidas del Centro Histórico en solemne procesión, realizando la meditación del Vía Crucis.

Según datos alrededor de la imagen, refiere que data del siglo XVIII, reflejando el momento en el que Jesús recién ha expirado en la Cruz, sus ojos totalmente cerrados con leves lágrimas que resbalan por sus mejillas.

La espalda escarnecida producto de la flagelación, los hilos de sangre que salen desde la cabeza atravesando el cuerpo y el dramatismo de los clavos atravesando manos y pies. Pero la característica más significativa de la imagen es la herida del costado reflejando el momento que del pecho emanó agua y sangre.

Se cree que la imagen se procesionaba en tiempos anteriores en la noche del Jueves Santo, acompañada del «Lignum Crucis» que es una astilla de la verdadera cruz de Jesús.

No obstante, se tiene conocimiento que desde los años 70, el Cristo de la Preciosa Sangre, retomó este cortejo procesional la noche del Quinto Viernes de Cuaresma, misma que a la fecha continúa realizándose.

PUNTOS DE REFERENCIA

Salida: 18:00 horas
Avenida Centroamérica y 14 calle: 19:00 horas
Santuario de Guadalupe: 20:50 horas
Entre Parques: 21:35 horas
Catedral Metropolitana: 22:00 horas
Arco de Correos: 23:40 horas
Entrada: 00:30 horas