TGW
Guatevision
DCA
Prensa Libre
Canal Antigua
La Hora
Sonora
Al Día
Emisoras Unidas
AGN

Hundimiento del terreno pone en riesgo la infraestructura de las grandes ciudades de Estados Unidos
Más de 34 millones de personas en EE. UU. viven en ciudades donde la subsidencia del suelo amenaza infraestructuras clave, revela un estudio de Nature Cities.
Enlace generado
Resumen Automático
Un estudio Land subsidence risk to infrastructure in US metropolises publicado por la revista Nature Cities advierte sobre el riesgo de hundimiento del suelo en las principales áreas urbanas de Estados Unidos, una amenaza creciente impulsada, principalmente, por la extracción de agua subterránea.
Según el informe, al menos el 20% de las zonas urbanas en las 28 ciudades más grandes del país presentan niveles significativos de subsidencia del terreno, afectando directamente a más de 34 millones de personas.
La subsidencia amenaza infraestructura clave
El fenómeno de subsidencia, que consiste en el descenso progresivo del nivel del suelo, representa una seria amenaza para la infraestructura urbana.
El estudio destaca que edificios, cimientos, carreteras, puentes y represas son los elementos más vulnerables a los efectos del hundimiento diferencial del terreno.
Cuando este hundimiento ocurre de forma rápida o desigual, puede comprometer la integridad estructural de estas construcciones, elevando los costos de mantenimiento y reparación.
Además, se estima que más de 29 mil edificaciones se encuentran ubicadas en zonas de alto riesgo, lo que representa un desafío para la planificación y sostenibilidad urbana en Estados Unidos.
¿Por qué se hunde el suelo?
El informe explica que la extracción excesiva de agua subterránea es uno de los factores más determinantes del hundimiento.
Al extraer agua a un ritmo superior al de su recarga natural, disminuye la presión de poros en los acuíferos, lo que provoca la compactación de sedimentos, sobre todo los de grano fino. Este proceso conduce al hundimiento de la superficie, también conocido como subsidencia.
Este fenómeno es particularmente pronunciado en los acuíferos confinados, donde la relación entre la baja del nivel freático y el hundimiento del terreno es más evidente.
Sin embargo, las condiciones hidrogeológicas locales pueden influir considerablemente en la velocidad y magnitud del proceso.
Radiografía urbana del hundimiento: análisis de ciudades con mayor riesgo
El reporte proporciona un análisis detallado sobre el riesgo de subsidencia del terreno de 28 ciudades de Estados Unidos, evidenciando cómo factores como el tipo de acuífero, la historia de extracción de agua subterránea y las condiciones geológicas locales influyen directamente en la magnitud del problema.
Houston, Texas
Es una de las ciudades con las tasas más altas de hundimiento del suelo, superando los 4 mm por año.
Esta rápida subsidencia se relaciona principalmente con la extracción intensiva de agua subterránea y actividades industriales.
Dallas y Fort Worth, Texas
Ambas zonas registran tasas similares, también por encima de los 4 mm anuales, lo que refleja una fuerte explotación de acuíferos y un riesgo significativo para la infraestructura urbana.
Chicago, Illinois
Exhibe tasas promedio de 2 a 3 mm por año, con variaciones dentro del área metropolitana.
En esta ciudad, la subsidencia es consecuencia tanto de procesos naturales como de la actividad humana.
Nueva York, New York
Presenta tasas más moderadas, entre 1 y 2 mm por año. En esta ciudad, el hundimiento se asocia a procesos tectónicos, el peso de las construcciones y la extracción de recursos naturales.
San Francisco, California
Muestra tasas variables, con algunos puntos críticos o hotspots que alcanzan hasta 3 mm por año. Las causas combinan la carga urbana (construcción, tráfico) y la compactación de sedimentos.
Las Vegas, Nevada
Registra algunas de las tasas más elevadas, llegando a 3.5 pulgadas por año (aproximadamente 9 cm), como resultado de la sobre extracción de agua en zonas áridas y sedimentarias.
Phoenix, Arizona
También enfrenta altas tasas de subsidencia, con valores similares a Las Vegas (hasta 9 cm anuales), principalmente debido a la sobreexplotación de acuíferos en un entorno de baja recarga hídrica natural.
Los Ángeles, California
Tiene tasas estimadas de 2 a 3 mm por año, con zonas críticas vinculadas a extracciones de agua tanto en áreas urbanas como periurbanas.
Detroit, Michigan
Registra una subsidencia baja, cercana a 1 mm anual, principalmente atribuida a procesos naturales y una menor presión sobre los acuíferos.
Este panorama muestra que la subsistencia del terreno varía considerablemente entre regiones. Las ciudades del suroeste, especialmente en Texas, Arizona y Nevada, enfrentan un riesgo mucho más alto, con tasas que pueden superar los 9 centímetros anuales.
En contraste, ciudades del este y medio oeste experimentan un hundimiento más moderado, de 1 a 3 mm por año, aunque también influido por factores humanos y naturales.
El informe aclara que la relación entre extracción de agua subterránea y hundimiento del suelo no siempre es lineal a nivel regional. Esto sugiere que otros factores, como las características del suelo, el uso del suelo y las actividades humanas, también influyen en la vulnerabilidad urbana.
Estrategias para mitigar el hundimiento del terreno
Para enfrentar este fenómeno, los investigadores proponen una serie de estrategias que pueden ser adoptadas por gobiernos locales y nacionales:
- Monitoreo continuo: El uso de tecnologías como el Interferometría Radar de Apertura Sintética (InSAR) permite mapear y vigilar en tiempo real las zonas más afectadas por la subsidencia, mejorando la capacidad de respuesta temprana.
- Gestión sostenible del agua: Se recomienda reducir las tasas de extracción, implementar proyectos de recarga artificial de acuíferos y fortalecer las políticas de control del consumo para garantizar la integridad de los recursos hídricos.
- Planificación urbana inteligente: El riesgo de hundimiento debe integrarse en los planes de desarrollo urbano. Esto implica restringir construcciones en zonas de alto riesgo y diseñar infraestructura resistente a los movimientos del suelo.
- Reforzamiento de infraestructuras: Se deben adaptar edificios, carreteras y puentes para soportar desplazamientos del terreno. En algunos casos, incluso podría considerarse la reubicación de infraestructuras en zonas altamente vulnerables.
- Educación y participación ciudadana : El informe subraya la importancia de campañas de concientización sobre el uso responsable del agua y la necesidad de involucrar a comunidades en la toma de decisiones.
- Políticas integradas y colaboración multisectorial: Se propone establecer marcos normativos participativos que integren a científicos, autoridades locales y organizaciones comunitarias, fomentando un enfoque adaptativo, cíclico y basado en datos.
Hacia una resiliencia urbana
El estudio concluye que el hundimiento del terreno no es un fenómeno inevitable, sino un desafío que puede gestionarse con planificación adecuada, tecnologías de monitoreo y una gobernanza colaborativa.
Garantizar la resiliencia de las ciudades ante la subsidencia será clave para proteger tanto la infraestructura crítica como el bienestar de millones de personas.