Cambios en el gabinete de Bernardo Arévalo: más de 60 relevos en 22 meses

Cambios en el gabinete de Bernardo Arévalo: más de 60 relevos en 22 meses

El Ministerio de Gobernación se queda con tres vacantes luego del escándalo por la fuga de 22 pandilleros de la cárcel Fraijanes 2.

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Resumen Automático

16/10/2025 00:05
Fuente: Prensa Libre 

Entre señalamientos de posible corrupción, inconformidades y supuesta colaboración en la fuga de 20 reos, el gobierno de Bernardo Arévalo acumula más de 60 cambios en puestos de alto poder en los 22 meses de administración. Ahora enfrenta una serie de cargos de toma de decisión que deben ser ocupados.

El pasado miércoles 15 de octubre, a través de un video, el mandatario aceptó la renuncia de Francisco Jiménez como ministro de Gobernación; la de José Rolando Portillo, como viceministro de Seguridad, y la de Claudia Palencia, como viceministra Antinarcóticos, aunque no se anunciaron los nuevos mandos.

También fue destituido Ludin Godínez como director del Sistema Penitenciario el lunes último, junto con las autoridades de tres centros carcelarios.

Por otro lado, minutos antes de que se oficializara la salida de Jiménez, fuentes cercanas al Ministerio de Gobernación (Mingob) indicaron que también se destituyó a mandos medios de unidades y departamentos de distintas direcciones a cargo de esa cartera.

Sin rumbo claro

El gobierno enfrenta, además, una crisis de orientación política derivada de no haber integrado sus cuadros durante el proceso de transición, según María del Carmen Aceña, del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (Cien).

“Debe tener equipo, y eso es, creo, lo que ha fallado. No son un equipo. Como que no hay un rumbo ni un plan de gobierno sólido. Entonces, sí, es desafiante”, comentó Aceña.

Recalcó que el presidente aún está a tiempo de definir una hoja de ruta clara y centrarse en pocas metas para que los funcionarios tengan una dirección común y las instituciones trabajen en función de esos objetivos.

“No hay un verdadero plan de gobierno. Tiene que concentrarse en tres metas; así, todos trabajan juntos”, indicó.

Consideró que también hay pocas opciones para elegir al nuevo ministro y a sus viceministros, debido a señalamientos de corrupción y al desgaste natural de una administración, especialmente después del segundo año.

Reconoció que se requieren personas con conocimiento y capacidad política, además de cuadros técnicos fortalecidos que comprendan su rol administrativo, pero también las dinámicas políticas. Añadió que algunos sectores han intentado apoyar al gobierno, pero algunos titulares de cartera no han atendido las retroalimentaciones.

“Tienen que escuchar —los ministros—, tienen que rodearse de personas críticas. Sus ministros deben ser menos arrogantes. Hay algunos que creen que se la saben todas, pero no tienen experiencia política. Tienen que confiar —en quienes los asesoran—”, manifestó.

Recordó que el sistema guatemalteco sigue siendo presidencialista a los ojos de la ciudadanía, aunque, en realidad, un gobernante puede hacer poco si no cuenta con mayoría en el Congreso. Agregó que las negociaciones parlamentarias en las que participa el Ejecutivo consisten en asignar montos abiertos a proyectos inexistentes, práctica que, dijo, debe cesar.

Relevos en el gobierno

Además de los cambios en la cúpula del Mingob, este año hubo otras dos salidas en el Sistema Penitenciario: Sergio Vela y José Luis Suárez.

A principios de año también se aceptó la renuncia de Mynor Estrada como ministro de Agricultura, Ganadería y Alimentación. Con su salida, se concretaron los relevos en los viceministerios de esa institución.

Asimismo, se aceptó la renuncia de las gobernadoras de Guatemala, Baja Verapaz, Jalapa y Quiché. En el caso de Aura Enríquez, de Suchitepéquez, se aceptó su dimisión, aunque no abandonó el cargo ante la falta de designación de su sucesor.

Iván Carpio dejó la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad (SAAS) luego de que se hiciera público el destino de fondos de la institución y el uso de instalaciones para un baby shower.

También fue relevada Evelyn López, quien dejó la Secretaría Privada de la Vicepresidencia. Su lugar lo asumió Miriam Miyares, anterior secretaria particular, y a su vez fue reemplazada por Raisa Marroquín, quien dirigía la oficina de Proyectos, ahora bajo el mando de Julio Eufragio.

También Antonio Romero salió del viceministerio de Inversión y Competencia del Ministerio de Economía, y Sandra Carballo, del viceministerio de Hospitales de la cartera de Salud.

Hubo otros movimientos, como el de Werner Ovalle, quien dejó de ser viceministro Antinarcóticos para asumir como superintendente de Administración Tributaria; Christian Espinoza, que salió de la Secretaría de Inteligencia Estratégica para convertirse en embajador en Uruguay; y Marco Livio Díaz, exsuperintendente, ahora embajador en Honduras.

El primer año de gobierno cerró con cerca de 35 relevos, entre ellos, el de Jazmín de la Vega, del Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (CIV), y, meses después, el de su sucesor, Félix Alvarado.

También dejaron el cargo Óscar Cordón, del Ministerio de Salud, y María José Iturbide, quien inició como ministra de Ambiente y Recursos Naturales.