La lluvia no fue impedimento para que los más fieles seguidores del cantante mexicano Alejandro Fernández asistieran, anoche, a su concierto para cantar sus mejores éxitos, ataviados con capas y botas para protegerse de las inclemencias del tiempo.

El Potrillo promociona en varios países su gira «Hecho en México» y, como parte del tour, se presentó ayer en Explanada Cardales de Cayalá, zona 16 de la capital guatemalteca.

Sonriente, Fernández bajó la escalera que conecta al escenario, y, ataviado con traje de mariachi, comenzó la velada interpretando el tema Tantita pena, que desató la algarabía de los asistentes.

Luego de interpretar tres canciones, el artista mexicano expresó: “Quiero que sepan que los extrañé mucho; tenía muchas ganas de cantarles para llenar sus corazones de mucha alegría”.

Su repertorio musical de rancheras y baladas incluyó Nube viajera, Caballero, Mátalas, Como quien pierde una estrella y Me dediqué a perderte, entre otros. “Aprovechemos que se calmó la lluvia”, dijo el Potrillo cuando mejoró el clima.

El cantante prosiguió con su espectáculo, acompañado de músicos y el mariachi. También recordó emocionado el legado de su fallecido padre, Vicente Fernández, al cantar un popurrí.

La potente voz de Alejandro Fernández también se escuchó en algunos sectores de las zona 1 y 5 capitalina, como lo reportaron algunos vecinos en sus redes sociales.